Ana Casaca, directora de innovación de Galp.

Ana Casaca, directora de innovación de Galp. Galp

Gran Empresa

Casaca (Galp): la firma invertirá 180 millones en innovación hasta 2025 y será "irreconocible" para 2030

La directora de innovación de Galp explica que el objetivo es "allanar el camino hacia la transición energética y lograr la neutralidad en carbono".

11 mayo, 2023 02:18

Ana Casaca, directora de innovación en Galp, pone nombre y apellidos a la relevancia que tiene esta área para la compañía, en concreto, 180 millones de euros. Esta es la cifra que la firma invertirá en la disrupción hasta 2025, un número que, según afirma, revela su "ambición". 

En una entrevista en exclusiva con D+I, la directiva explica que la innovación se ha posicionado como una función transversal a toda la empresa con el objetivo de "allanar el camino hacia la transición energética y lograr la neutralidad de carbono". 

En concreto, Galp distingue tres áreas de desarrollo hacia las que orienta sus esfuerzos: la gestión de la energía y las renovables; la innovación comercial (smart retail o smart mobility); y la optimización de la producción y la mejora de las operaciones. 

Casaca explica que, para dar salida a la innovación en estos campos, actualmente, forman parte de su equipo 25 personas procedentes de ocho nacionalidades distintas, lo que, apunta, "crea un arco de innovación que se extiende desde Madrid hasta Río de Janeiro". 

Hacia la neutralidad en carbono

Una de las áreas principales en las que se centra Galp está relacionada con la transición energética, ya que la compañía quiere ser neutra en carbono para 2050. Con la vista puesta en este objetivo, la firma ha invertido "miles de millones de euros" en proyectos relacionados. 

Según precisa Casaca, actualmente, la compañía está aplicando un plan de inversiones que prevé la asignación de alrededor de 3.500 millones de euros, en los próximos tres años, destinados al desarrollo de nuevos proyectos de producción de energía renovable y baja en carbono.

La directiva señala que, en materia de hidrógeno, su intención es convertir Sines (Portugal) en un Parque de Energía Verde para la producción a gran escala de este componente, además de biocombustibles y otros elementos bajos en carbono. También, explica que tienen previsto entrar en la cadena de valor de las baterías de litio, "un sector crítico para el futuro, en el que nuestra dependencia de China ronda el 80%".  

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Respecto a las renovables, Casaca recuerda que son el tercer productor de energía solar fotovoltaica de la Península Ibérica, con 1,4 GW de capacidad instalada en operación, que avanza que multiplicarán hasta los 4 GW en 2025.

En este proceso, la responsable de innovación en Galp señala que la digitalización se sitúa como un factor muy relevante, ya que permite posicionar a los "individuos en el centro", otorgándoles el control total de su producción y consumo de energía en tiempo real. "Se trata de capacitar a las personas para que controlen su propio proceso de descarbonización", precisa. 

Del hidrógeno verde a la micromovilidad

En este camino hacia la descarbonización de la movilidad, Casaca explica que llevan años "llamando la atención a los responsable de toma de decisiones en Europa" sobre el papel que podrían desempeñar "los e-combustibles" para descarbonizar aquellos sectores que no pueden electrificarse o cuyo proceso es más complejo, como el transporte aéreo o el marítimo.  

"Estamos invirtiendo en hidrógeno verde, y estamos estudiando otros tipos de moléculas bajas en carbono, como los biocombustibles y también los combustibles sintéticos", señala. 

Por otro lado, Casaca señala que, en materia de movilidad eléctrica su intención pasa por tener 10.000 puntos de carga en Iberia en 2025, en línea con su estrategia de crear un corredor entre Lisboa y Madrid con recarga ultrarrápida. "Tenemos planes para crear una red de estaciones de recarga de hidrógeno para vehículos en Portugal y España", apunta. 

En esta área, la firma ha llevado a cabo proyectos innovadores como, por ejemplo, uno centrado en aprovechar las farolas y el mobiliario urbano para ofrecer a los residentes de viviendas sin aparcamiento privado la posibilidad de cargar sus vehículos eléctricos. 

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También, otro basado en darles una "segunda vida" a las baterías para mejorar el despliegue de los centros de recarga ultrarrápida, reduciendo la energía necesaria y los costes operativos. Casaca avanza que en 2023 se instalará la primera estación de este tipo, que se ubicará en Madrid, gracias a un proyecto piloto de Galp con BeePlanet. 

Otra de las áreas donde la compañía está centrando sus esfuerzos en innovación es la micromovilidad. La directiva destaca que hace apenas unos meses lanzaron, junto a Boost y Swobbee, la primera red de estaciones de intercambio de baterías de bicicletas y scooter eléctrica en pocos segundos, aumentando la sostenibilidad y la eficiencia del proceso. 

Hasta la fecha, Galp cuenta con tres estaciones en Lisboa y dos en Madrid, que están disponibles durante todo el día a través de una aplicación para smartphone. 

Por otro lado, la firma también profundiza en la innovación aplicada a los procesos químicos, un trabajo que se materializó en el lanzamiento en Brasil en 2022 del Centro de Excelencia en Combustibles Sintéticos Avanzados (CECSA). "Mientras miramos hacia los combustibles del futuro, no dejamos de innovar y mejorar continuamente los combustibles líquidos que ya ofrecemos", precisa Casaca. 

Más de 400 proyectos 

No obstante, Galp no siempre recorre este camino de disrupción completamente sola, sino que la empresa también cuenta con una plataforma para el desarrollo de la innovación abierta a través de programas como UpComing Energies. En él, la compañía se une a diferentes startups para impulsar diferentes proyectos relacionados con la movilidad eléctrica, las energías renovables o la gestión energética. 

"Al trabajar con startups, adoptamos nuevas habilidades, conocimientos y tecnologías que nos permiten trazar el camino que nos proponemos seguir", indica Casaca. 

La responsable de innovación de Galp explica que, hasta la fecha, se han puesto en marcha 426 proyectos derivados de las 29 convocatorias que han tenido lugar en el marco del mencionado programa en diferentes partes del mundo. 

Por ejemplo, destaca que, en Brasil, han desplegado una iniciativa de captura de carbono a través de hidratos y, en África Subsahariana, junto a una startup local, han desplegado soluciones de refrigeración basadas en la energía solar. En España también están presentes a través de una colaboración con Startup Alcobendas o en el Mobility City de Zaragoza. 

Una empresa "casi irreconocible" gracias a la innovación

Con todos estos proyectos en el horizonte, la directora de innovación en Galp precisa que la innovación se ha convertido en una "palanca de desarrollo" ubicada en el centro de la estrategia de la compañía. 

Aún así, puntualiza que esto implica una doble responsabilidad: "desafiar la estrategia" para alcanzar nuevas oportunidades y asumir grandes retos y transformarlos en proyectos reales que aporten valor. "Para ello, resulta imprescindible invertir más en innovación, extendiendo sus efectos en la educación, la sociedad, la empresa y el Estado", afirma. 

"Dado que la innovación está impulsando nuestra transformación empresarial, Galp será una empresa muy diferente en 2025 y casi irreconocible a finales de la década actual", concluye.