La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) cree que Ricardo Montoro y Ricardo Martínez Rico eran los testaferros del exministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, por el descuadre entre sus ingresos y su peso accionarial en Equipo Económico.
Los investigadores destacan en el sumario del caso, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, que tanto el hermano de Montoro como la mano derecha del expolítico en el despacho cobraron muy por debajo de las participaciones que tenían en la empresa.
Ricardo Martínez Rico fue secretario de Estado de Presupuestos en el Gobierno de José María Aznar y es presidente ejecutivo de Equipo Económico desde la salida de Montoro en 2008.
Además, su hermano Felipe Martínez Rico fue jefe de Gabinete de Cristóbal Montoro y subsecretario de Hacienda durante el Gobierno de Mariano Rajoy.
Cristóbal Montoro vendió gran parte de su paquete accionarial a Ricardo Martínez Rico en 2008. Sin embargo, la UCO cree que fue una venta simulada y que el exministro de Hacienda siguió controlando sus participaciones en Equipo Económico.
Martínez Rico pasó de tener un 25% de acciones a un 43% en 2008. En cambio, los investigadores destacan que nunca llegó a ingresar más de un 22% de la cifra anual de negocio del despacho.
Por tanto, la UCO sospecha que Montoro utilizó como testaferro de sus participaciones a Martínez Rico. El exsecretario de Estado de Presupuesto ingresó un 24% menos de lo que le correspondía por su peso accionarial.
Ingresos de Ricardo Martínez Rico procedentes de Equipo Económico.
De igual forma, la Guardia Civil sostiene que el hermano del exministro de Hacienda ejerció el mismo rol al cobrar un 10% anual menos de lo que debía percibir por su 15% de Equipo Económico entre 2008 y 2014.
Del estudio de las cuentas, los investigadores concluyen que Ricardo Montoro cobró 2,3 millones de euros menos de lo que le debía haber ingresado.
También señalan que el hermano del exministro de Hacienda ingresó 50.000 euros de Equipo Económico en 2013 y 2014, cuando en teoría ya había vendido todas sus participaciones.
Sin contar estos dos años, y teniendo en cuenta solo en los que fue socio del despacho (2008-2012), Ricardo Montoro "habría recibido un porcentaje inferior al que le habría correspondido, concretamente una media anual cercana al -14%".
"El hecho de que Ricardo Montoro no percibiera unos ingresos del despacho acordes al porcentaje de su participación social, al igual que en el caso de Martínez Rico, pudiera responder a que una parte de dicho porcentaje del que era titular formalmente, fuera en realidad una titularidad de 'hecho'", concluye la UCO.
Sobre Martínez Rico indica que "percibe un 19,20% de la cifra de negocio de Equipo Económico", cuando en realidad poseía el 43% de las acciones.
Ingresos de Ricardo Montoro procedentes de Equipo Económico.
"Las percepciones del resto de socios son mucho más próximas a sus porcentajes de participaciones: Francisco Piedras -3,44%, Salvador Ruiz +0,13%, Manuel de Vicente Tuto +1,40%".
"Los ingresos anuales de Ricardo Martínez Rico guardan una mayor relación con el porcentaje de participaciones que poseía con anterioridad a la recepción de la mayor parte de las participaciones de Cristóbal Montoro", indica el oficio policial.
Para los investigadores, el uso de testaferros por parte de Montoro explicaría el correo electrónico en el que Felipe Martínez Rico -que ostentó puestos de la máxima confianza de Montoro, como jefe de su gabinete en 2011 y subsecretario de Hacienda en 2016- pregunta al entonces ministro por el currículum que debe aparecer en la web de Transparencia del Gobierno.
En este currículum "se omite información sobre la actividad privada que podría estar realizando" el entonces ministro de Hacienda.
De esta forma, las bases de datos públicas no recogerían la existencia de la relación de Montoro con la consultora ni los ingresos reportados, en su caso, a través de Equipo Económico.
En un informe de los Mossos, se señala que los socios que compraron y vendieron acciones del despacho lo hicieron al precio de la constitución de la empresa, sin que se tuviera en cuenta el valor de la firma.
Los investigadores señalan que esta maniobra indicaría que "pueden estar recibiendo sus beneficios de forma encubierta".
Por todo lo expuesto, el oficio policial concluye que "indiciariamente revelaría la existencia de otros beneficiarios finales reales o su eventual condición de testaferros de terceros".
