Las magistradas Ana Ferrer y Pilar Teso han anunciado hoy que retiran sus candidaturas para presidir las Salas Penal y de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo.
Este paso deja expedito el camino para que Andrés Martínez Arrieta y Pablo Lucas, actuales presidentes en funciones de esas Salas, sean nombrados para esos cargos.
Ferrer ha formalizado su renuncia en una carta a la presidenta del alto tribunal y del Consejo General del Poder Judicial, Isabel Perelló. La presidencia de la Sala Penal está vacante desde hace más de siete meses tras el fin del mandato de Manuel Marchena.
En su misiva, conocida por EL ESPAÑOL, Ferrer alude a la "incapacidad" del CGPJ "para aunar los consensos necesarios" para cubrir la plaza, que requiere un mínimo de 13 votos.
Ninguno de los dos grupos del órgano de gobierno de los jueces, con 10 vocales cada uno, alcanza la mayoría requerida.
Ferrer señala que "me aparto voluntariamente" del concurso para presidir la relevante Sala Penal del Supremo -que exige la responsabilidad penal a los miembros del Gobierno, diputados y senadores- por "el mismo interés de servicio público que me animó a presentarme".
"Ninguna de las Salas de este Tribunal, pero aún menos la Sala Segunda dada la naturaleza de los asuntos de los que conoce, merece perpetuar su funcionamiento con una Presidencia en funciones", señala.
"La confianza de la ciudadanía en sus instituciones, y en particular en el funcionamiento de los Tribunales de Justicia, se debilita ante la apariencia de que los vetos ideológicos prevalecen sobre los criterios de mérito, capacidad y presencia equilibrada de hombres y mujeres en las instituciones públicas", afirma Ferrer.
Fuentes del CGPJ niegan "rotundamente" vetos ideológicos y recuerdan que el candidato apoyado por el grupo de vocales propuestos por el PP es también un candidato progresista, Andrés Martínez Arrieta.
Amenaza de una interinidad 'sine die'
Esas fuentes relacionan más bien la renuncia de Ferrer con una última reunión negociadora entre los vocales propuestos por el PP y por el PSOE sobre los nombramientos de altos cargos judiciales pendientes, en particular las Presidencias de las Salas Penal y de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo.
En esa reunión, que se celebró en la tarde de ayer, los consejeros del grupo conservador reiteraron su cerrada negativa a apoyar a Ferrer al considerar que Martínez Arrieta tiene mayor mérito y experiencia, es el magistrado más antiguo y lleva desempeñando muchos meses la presidencia en funciones de la Sala Penal.
Las mismas razones esgrime el sector conservador en el caso de Pablo Lucas, uno de los juristas más prestigiosos de España, dentro y fuera del Tribunal Supremo.
Teso aún no ha presentado la carta de renuncia, pero lo hará antes del martes próximo. Fuentes próximas a la magistrada señalan que su misiva, más breve que la de Ferrer, hará alusión al excesivo tiempo que ha transcurrido desde que se anunció el concurso para la presidencia de la Sala Tercera, el pasado octubre, lo que, junto a la incapacidad del CGPJ para resolver, ha conducido a una interinidad en el cargo que, a su juicio, no se puede prolongar más,
Los consejeros del sector conservador aseguraron a sus colegas progresistas que los nombramientos de Ferrer y Teso como presidentas no se iba a producir en ningún caso y que estaban dispuestos a mantener las presidencias de ambas Salas en funciones sine die.
Además, las negociaciones incluyen otras plazas vacantes en las que el grupo progresista está interesado y que podrían obtener, lo que se suma al hecho de los escasos meses que restan para las jubilaciones de Martínez Arrieta y Lucas.
La retirada de las candidaturas de Ferrer y Teso permitirá el nombramiento de los actuales presidentes en funciones de las Salas Segunda y Tercera en el pleno del CGPJ previsto para el día 23.
El CGPJ solo ha votado una vez las presidencias de las Salas Segunda y Tercera. Fue el pasado 7 de mayo.
Tras cuatro votaciones consecutivas para cada plaza, los dos candidatos a presidir la Sala Penal -Andrés Martínez Arrieta y Ana Ferrer- y los dos para la Sala de lo Contencioso-Administrativo -Pablo Lucas y Pilar Teso- no lograron los 13 votos mínimos necesarios para ser elegidos. Ninguno pasó de los 10 votos.
Las ternas volvieron a la Comisión de Calificación, que aún no ha efectuado una nueva propuesta. Si ésta hubiera fracasado, se anunciaría un nuevo concurso.
