La presidenta del Consejo de Estado, Teresa Fernández de la Vega, ha alertado este viernes de la "crispación" y "polarización" que se vive en España en un momento en el que, a su juicio, "lo que necesitamos es dialogar y encontrar espacios de acuerdo que ofrezcan soluciones a los ciudadanos".

Fernández de la Vega y el consejero permanente Fernando Ledesma han presentado la Memoria del Consejo de Estado correspondiente a 2019 en una rueda de prensa, la segunda en toda su historia. La vetusta institución, creada por Carlos I en 1522, empieza a adaptarse al signo de los tiempos: una semana después de decretarse el estado de alarma por la Covid-19 el pasado marzo ya estaba preparada para celebrar reuniones telemáticas.

Preguntada por los ataques -en ocasiones provenientes de miembros del Gobierno- a instituciones como el Poder Judicial o el Rey, Fernández de la Vega ha indicado que "hay un debate en la sociedad sobre la Corona. No hay que tener miedo ni huir de él, puede ser un debate crítico pero desde el respeto institucional".

Añadió que las resoluciones judiciales "están sometidas a la crítica, pero con contención y respeto en el marco constitucional de separación de poderes. La función judicial no está exenta de la crítica, pero dentro de los parámetros democráticos de contención y mesura".

"Lo deseable es que los bloqueos cesen"

La presidenta del Consejo de Estado no quiso pronunciarse sobre la eventual reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial que sopesa el Gobierno para forzar la renovación del órgano de gobierno de los jueces, ya que el Consejo de Estado tendría que elaborar un dictamen sobre el anteproyecto de ley en caso de que finalmente se aprobase por el Ejecutivo. Pero sí indicó que "lo deseable es que los bloqueos cesen".

El más alto órgano asesor del Gobierno está pendiente de la cobertura de la vacante dejada por Landelino Lavilla, fallecido el pasado abril. Fernández de la Vega, que elogió la figura de Lavilla, restó trascendencia al retraso en la designación de la persona que le sucederá y confió en que el Ejecutivo -que en este caso no tiene que ponerse de acuerdo con ninguna fuerza política- la nombre en los próximos días.

Fernando Ledesma, por su parte, puso de relieve que en 2019 el Consejo de Estado despachó 1.099 expedientes, de los cuales 918 fueron objeto de dictamen de fondo. Es algo menos de lo que se resolvió en 2018, cuando se despacharon 1.157 expedientes, de los cuales 1.030 fueron informes de fondo.

El consejero permanente destacó que prácticamente el 99% de los dictámenes aprobados por el Consejo de Estado son secundados por la Administración u organismo que ha elevado la consulta.

El Consejo de Estado se dispone a abrir "un proceso de diálogo” con los órganos consultivos autonómicos, con los que se reunirá los días 5 y 6 de noviembre en coincidencia con el el 40 aniversario de la Ley Orgánica del Consejo de Estado.

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