La cúpula policial del comisario Eugenio Pino creó una operación secreta para localizar e intervenir sin conocimiento judicial toda la documentación comprometida que el extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas custodiaba. Como gancho, utilizó al chófer personal del exsenador, su persona de confianza, con el objetivo de que identificara una casa segura entre las sierras de Soria y Burgos. Un lugar donde Bárcenas podría esconder esos documentos que perjudicaban la imagen del PP tanto en la prensa como en los tribunales. 

instrucciones enviadas para que sean preguntadas al chófer de Bárcenas.

El guión de esas preguntas, a las que ha accedido este diario, es un documento de trabajo de los policías que integraron la llamada operación Kitchen, investigada ahora por partida doble en la Audiencia Nacional. El objetivo era que el agente de enlace directo con el confidente, el comisario José Manuel Villarejo, le preguntara por los frecuentes viajes de Luis Bárcenas a "la zona de la sierra de Soria/Burgos". 

El documento, sin sello, ni firma, ni número de expediente, ni nada que sirva para identificar a los autores, solicita que se pregunte al conductor de Bárcenas sobre "Cuántas veces lo llevó y en qué fechas, lugares que visitaron, qué personas fueron y donde durmieron" y sobre todo si "llevó posteriormente, después de ingresar en prisión, a alguno otro miembro de la familia y en qué fechas". 

Preguntas para el chófer

Este diario ya desveló que los policías habían seguido sin conocimiento de juzgado alguno y sin dar cuenta de los resultados a los miembros de la familia Bárcenas. De hecho, lo hicieron incluso con el propio Sergio Ríos, como demuestran los documentos de trabajo utilizados en la operación Kitchen.

Parte de gestiones para realizar con el Chófer de Bárcenas.

En otro de los fragmentos, los agentes hablan del seguimiento realizado a un varón sin identificar el 15 de agosto de 2013. El escrito clarifica que el objeto de ese seguimiento era en realidad el propio chófer de Bárcenas, que se habría citado en la puerta de un restaurante de Madrid con la persona sin identificar para darle un paquete que fue entregado desde la ventanilla. 

Surgen nuevas preguntas que Villarejo debe tratar con el confidente: "identificación de la persona del Metro como la que le entregó documentación el día 15 de agosto en la puerta del restaurante Arturo en la Plaza República Argentina". "Preguntarle porqué abrió el maletero del Alfa Romeo el día 15 si la entrega de documentación se llevó a cabo por la ventanilla del copiloto". "Preguntarle si le entregó algo a esa persona". Por el momento, nada se sabe del personaje desconocido.