El careo celebrado este lunes entre el expresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y el presidente de La Razón, Mauricio Casals, en los juzgados de Plaza de Castilla, no ha servido para esclarecer quién es la "magistrada amiga" que presuntamente habría avisado a Casals y al exdirectivo del Canal de Isabel II, Edmundo Rodríguez Sobrino, de que estaban siendo investigados en el caso Lezo. 

González y Casals han enfrentado sus versiones sobre esa posible filtración durante escasos 25 minutos ante el juez Ramiro García de Dios, del juzgado de instrucción número 6, en Plaza de Castilla.

Mauricio Casals ha negado que hablara a Ignacio González de esa "magistrada amiga" a la que el expresidente de la Comunidad de Madrid se refirió en una conversación con el exministro Eduardo Zaplana intervenida por la UCO en la instrucción del caso Lezo y que adelantó EL ESPAÑOL.

Durante esa conversación, González explica a Zaplana lo que le habría contado Casals: "Edmundo está 'acojonao', me ha dicho que le están grabando o no sé qué (...). Es que tenemos una amiga de la casa que es magistrada, que ha 'llamao' para decir 'oye, cuidao que han grabao una conversación de Edmundo muy extraña'".

En la diligencia del careo solicitada por el juez que lleva esta investigación separada del caso Lezo, según ha trascendido, Casals ha negado incluso que hiciera referencia a ninguna jueza. Según él, fue una "confabulación" que habría trasladado a Edmundo Rodríguez Sobrino, a raíz de las primeras informaciones en prensa que comenzaron a filtrarse en referencia a a las operaciones del Canal de Isabel II en Latinoamérica.

El titular del juzgado de instrucción número 6 de plaza de Castilla comenzó a investigar la posible filtración de una jueza tras la denuncia del abogado José Luis Mazón, que finalmente ha retirado la acusación ante la alta fianza exigida por el juzgado para seguir en el caso.