El magistrado del Supremo Pablo Llarena, instructor del procedimiento por rebelión abierto contra los exmiembros del Govern de Carles Puigdemont y exintegrantes de la Mesa del Parlamento catalán, ha rechazado la petición del partido Vox de volver a encarcelar a los seis antiguos consejeros a los que puso en libertad el pasado día 4 bajo fianza de 100.000 euros.

Jordi Turull, Raül Romeva, Josep Rull, Dolors Bassa, Meritxell Borràs y Carles

Mundó no regresarán, al menos de momento a prisión, ya que el instructor, con el respaldo del fiscal, considera que Vox "no ofrece razones que desvirtúen" los motivos por los que Llarena consideró que el riesgo de reiteración delictiva podía conjurarse con la prestación de la fianza.

El magistrado se apoya en el dictamen de los fiscales del Supremo, que expusieron que "el tiempo de permanencia en libertad y posterior a la

modificación de su posición procesal no se ha aprovechado por los

investigados concernidos por el recurso para dirigir o materializar

actuaciones de fuga, reiteración en el delito o destrucción del acervo

probatorio".