El constructor de confianza de Francisco Granados en su época como alcalde de Valdemoro, Ramiro Cid, le siguió en su andadura en la Comunidad de Madrid. En el sumario del 'caso Púnica' consta regalos que hizo el empresario a todo el equipo de Granados en la Comunidad, cuando Esperanza Aguirre ya era presidenta del gobierno regional. Cid envió regalo para las navidades de 2005 a sus secretarias, jefas de prensa, asesores y jefe de gabinete. Pero no sólo quería agasajar al que luego sería consejero de Presidencia madrileño. También hizo regalos al socialista Tomás Gómez cuando era alcalde de Parla así como a su equipo.

Entre los regalos hay plumas MontBlanc, cartera de Carolina Herrera o cestas de quesos, así como botellas de vino, bufandas o broches de mujer. Los regalos iban desde los 70 euros a los 670 euros, según tenía apuntado el propio Cid en una lista, incautada por la Guardia Civil al estallar el 'caso Púnica', dirigido por el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco.

Entre aquellos que Cid agradeció con regalos fueron Silvia de Saz, directora general del Suelo de la Comunidad de Madrid; María Luis Martín, que en el año 2005 ocupaba el cargo de Secretaría en la Consejería de Presidencia, Justicia, e Interior de la Comunidad de Madrid; Ana Belén Castillo, excargo de Secretaría en la Consejería de Presidencia, Justicia, e Interior de la Comunidad de Madrid; Nuria Bravo, exsecretaria de Granados; María García, asesora entonces de la Asamblea; Edelmiro Galván, asesor de la Comunidad en aquella épocaa, y todos aquellos vinculados a Granados.

Extracto del informe de la UCO donde se cita a Tomás Gómez y a otros.

Pero es que además, Cid envió regalos no solo a la mujer de Granados -en prisión desde octubre de 2014- sino a María Victoria Cristóbal, persona de su confianza y que en aquel entonces era directora de la Agencia Madrileña para la Emigración en la Comunidad de Madrid. Otros agasajados fueron Alfonso Colon de Carvajal, consejero en la empresa pública Arpegio, también en la lupa judicial; así como su director de gabinete, Ignacio Palacios, investigado en la causa.

Aquel 2005, Tomás Gómez recibió regalos del constructor, al igual que el concejal de Urbanismo de Parla, Wilfredo Jurado. En 2007, el sucesor de Gómez, José María Fraile, también tuvo sus regalos. En su caso fue el propio Cid quien al año siguiente, en 2008, le entregó en mano unos gemelos marca Loewe.

Uno de los regalos enviados por Ramiro Cid.

Todos estos regalos se sucedieron en el tiempo. En 2006, la mujer de Granados así como María Victoria Cristóbal, ambas recibieron un reloj. En ese año, muchos funcionarios del Ayuntamiento de Valdemoro recibieron regalos, como de otros ayuntamientos como el de Algete, San Martín de la Vega y Majadahonda -asu alcalde Narciso de Foxá-, entre ellos la socialista Eva Borox, que tuvo que dimitir como número 3 de la Asamblea de Madrid por Ciudadanos -tras cambiarse de partido-al saltar el escándalo de Púnica y para no perjudicar a la formación. En su caso recibió un regalo valorado en 411 euros. En 2006, todas las secretarias de la Comunidad volvieron a recibir regalos.

El mini de Cid

Cid fue el constructor que fue beneficiado por numerosa obra pública en Valdemoro cuando Granados fue alcalde. Gracias a sus gestiones, el empresario le hizo numerosos regalos, entre ellos un coche marca Mini que acabó incendiándose en el garaje del exdirigente 'popular' cuando todavía estaba a nombre de la empresa de Cid.

El constructor también quiso enviar regalos en 2006 al jefe de contratación, José Antonio Maté, y a la secretaria del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria adscrito a la Secretaria de Estado de Investigación, Desarrollo e Innovación del Ministerio de Economía y Competitividad.

En 2006, Tomas Gómez fue beneficiado con una pasmina y unos gemelos. Precisamente, la mano derecha de Granados, el empresario David Marjaliza, señaló ante el juez a Gómez como una de las personas que había recibido dinero a cambio del amaño de unas adjudicaciones de obra pública en Parla.

En 2007, al Canal de Isabel II

En 2007, Cid amplió esos regalos al Canal de Isabel II, concretamente al gerente en aquellas fechas, Ildefonso de Miguel, hombre de máxima confianza del ex presidente madrileño Ignacio González. También se acordó de todo el equipo de Ignacio Palacios.

Cid entregó en ese año regalos a dos funcionarios de la Guardia Civil: José Fernando Cantó (del servicio jurídico) y el coronel José García, aunque en su caso fue únicamente turrón.

"En relación a todo lo anteriormente expuesto, ha quedado demostrado que el empresario Ramiro Cid, durante las Navidades de los años 2005, 2006, 2007 y 2008, habría entregado diversos regalos o cestas de Navidad de una cuantía económica significativa, a personas que en esos años ocupaban algún cargo público o eran funcionarios de alguna Administración Pública", recoge el informe de la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil que analiza estos regalos.

"Considerando el importe de los regalos y la reiteración de los mismos, a juicio policial obedecería a la intención de predisponer favorablemente frente a las empresas de Cid a aquellos funcionarios cuya intervención pudiera repercutir sobre los intereses empresariales de esta persona. En buena parte de los casos, los destinatarios formaban parte de administraciones donde las empresas vinculadas al empresario han sido beneficiarias de adjudicaciones inmobiliarias", concluyen los agentes.

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