El PP se desmarca de la propuesta de Vox en inmigración. La nueva portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Ester Muñoz, ha asegurado este martes que su partido no respalda "ni las regularizaciones masivas ni las deportaciones masivas de inmigrantes", como plantea la formación de Santiago Abascal.
Muñoz, que se ha estrenado como portavoz tras el Congreso Nacional del PP celebrado el pasado sábado, ha subrayado que su formación tiene "muy claro" el marco legal vigente y que las leyes impiden este tipo de medidas generalizadas.
Vox puso este lunes sobre la mesa la necesidad de abrir un proceso de deportación masiva de inmigrantes.
Al igual que Muñoz, el secretario general del PP, Miguel Tellado, también ha rechazado la propuesta de Vox. En una entrevista en Onda Cero, ha señalado que su partido no comparte la postura de Abascal y ha recordado que en España ya existe una legislación en materia de extranjería que debe aplicarse con rigor.
Tellado ha dicho que hay mecanismos legales de regularización para aquellas personas que llevan tiempo en España y que conviven de forma estable en el país, aunque ha insistido en que esto no implica renunciar al control de la inmigración irregular.
"Nuestra postura es clara: en contra de la inmigración ilegal, a favor de la inmigración ordenada", ha añadido, es decir, que se ajuste a las necesidades sociales y económicas del país.
"Populismo"
En paralelo, Isabel Díaz Ayuso ha rechazado frontalmente la idea de deportaciones masivas. En un acto público celebrado en la capital, la presidenta madrileña ha criticado lo que considera una propuesta "populista" por parte de Vox y ha cuestionado la viabilidad real de ejecutar una expulsión generalizada de migrantes.
"Que alguien me diga cómo se expulsa masivamente, con qué métodos, y dónde van a enviar a los inmigrantes", ha dicho. A su juicio, Vox "propone soluciones fáciles a problemas complejos".
Ayuso ha centrado sus críticas en la gestión del Gobierno de Sánchez, al que acusa de haber permitido una "inmigración irregular masiva". A su juicio, se trata de un desafío "provocado" y "perfectamente medido" por el Gobierno para "crear problemas de convivencia", "saturar los servicios públicos" y, en última instancia, "reventar el país".
Reacción de Sánchez
Por su parte, el presidente del Gobierno ha reivindicado este lunes la contribución positiva de la inmigración a la sociedad española. En un mensaje en redes sociales, Pedro Sánchez ha recordado que España fue durante décadas un país de emigrantes y ha defendido que quienes hoy llegan al país lo hacen para "contribuir con su esfuerzo a construir una España mejor"
Sin referirse directamente a Vox, ha afirmado que España es una "tierra de acogida" y ha llamado a no olvidar el pasado para entender el presente.
Ante la polémica, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha matizado que su partido no ha propuesto expulsar a ocho millones de inmigrantes y ha asegurado que ni siquiera manejan una cifra concreta, ya que desconocen el número exacto de personas en situación irregular.
En un mensaje en X, ha criticado lo que considera una "manipulación" mediática y ha defendido que las expulsiones deben dirigirse a quienes han venido a delinquir, a vivir del esfuerzo ajeno o a imponer valores contrarios a los del país de acogida.