Publicada
Actualizada

Loreto Arenillas, diputada de Más Madrid y jefa de gabinete de Íñigo Errejón, ha dejado este miércoles su escaño en la Asamblea de Madrid. Lo hace cinco meses después de que la dirección del grupo le pidiera que dejara su puesto y la destituyera de sus responsabilidades dentro del partido por haber encubierto, supuestamente, una agresión del fundador de Podemos en un festival de música en Castellón.

La decisión de Arenillas coincide con una carta remitida por Gabriel Ortega, secretario de organización de Más Madrid, en la que asegura que Arenillas no "encubrió esas agresiones reprobables". "Ni tú, ni Más Madrid, somos responsables de dichos hechos, pero sí nos han causado a todos y todas dolor e indignación".

Así las cosas, Arenillas abandona la vida pública después de que su partido haya reconocido en una carta pública que no encubrió los hechos por los que, hace cinco meses, el mismo Más Madrid pidió su 'cabeza'.

Hay que recordar que a Arenillas se la acusaba de ser cómplice de un capítulo de acoso sexual que el exdiputado nacional habría protagonizado en un festival de música en Castellón y que una denunciante anónima en redes sociales aseguró que Arenillas trató de ocultar.

Esta situación llevó al partido a pedir su acta en la Asamblea y su dimisión, algo a lo que ella se negó al defender que ella no había encubierto ningún tipo de abuso cometido por Errejón. Aunque, en un primer momento, ella misma ofreció su escaño.

De hecho, durante estos cinco meses, cuando se le ha preguntado a la portavoz en la Asamblea, Manuela Bergerot, por el acta de Arenillas, ella siempre ha respondido que esperaba que la exdirectora de gabinete de Errejón "cumpliera su palabra".

En su carta publicada en su cuenta personal de X, Arenillas ha lamentado que en "esta época que nos ha tocado vivir (...) se juzga rápido, sin derecho a una defensa y la pena es el linchamiento más brutal que nadie podría imaginar". En una clara referencia a la petición que se hizo por la dirección de Más Madrid, encarnada por Rita Maestre y Mónica García, nada más conocerse los hechos.