El número uno de Vox al Congreso por Ciudad Real para el 28-A, Ricardo Chamorro, no es nuevo en política. El flamante fichaje del partido de Santiago Abascal ha formado parte en anteriores convocatorias electorales de formaciones vinculadas a la extrema derecha. 

Así, en los comicios europeos de 1999 fue en las listas de Democracia Nacional, un partido euroescéptico y de corte xenófobo cuyo ideario promueve un discurso anti inmigración. A nivel europeo, Democracia Nacional es miembro de Alianza por la Paz y la Libertad, una coalición de formaciones ultranacionalistas donde se incluyen los partidos de Le Pen o Vladimir Putin, entre otros. En aquella candidatura, Chamorro compartió lista con Christian Jorge Ruiz Reguant, secretario general del antiguo Círculo Español de Amigos de Europa (CEDADE), "uno de los grupos neonazis más numerosos y activos dentro de Europa", según advertía un informe del Parlamento Europeo de los años 90.

En aquella cita con las urnas, la lista del ahora candidato de Vox alcanzó tan sólo 8.053 sufragios (0,04%), quedándose fuera de la Eurocámara.

España 2000

Segundo intento. Un año después, coincidiendo con las elecciones generales de marzo del año 2000, Democracia Nacional, con el fin de "reunificar el patriotismo en España", se presentó en coalición con otros partidos ultra (Partido Nacional del Trabajo, Movimiento Social Republicano y Vértice Español) bajo el nombre Plataforma España 2000. Ricardo Chamorro fue también en las papeletas de España 2000 como número dos en la circunscripción de Palencia.

España 2000, presente en la manifestación de Colón de febrero para pedir al presidente Pedro Sánchez elecciones anticipadas, se define como un partido "social, patriota y antiglobalista".

También en UPN y PP

De Democracia Nacional y España 2000 a UPN. Once años más tarde de aquellas aventuras políticas coqueteando con la extrema derecha, Chamorro se incorporó a las listas del partido regionalista Unión del Pueblo Navarro para concurrir como candidato suplente en el municipio de Alsasua.

Y también fue simpatizante del PP. En una reciente entrevista, el hoy aspirante a ocupar un escaño en la Cámara baja reconocía haber sido afiliado del Partido Popular, pero años después rompió su carné: "Consideré que es un partido absolutamente inviable para obtener ese cambio que queremos para la nación". 

Ficha por Vox... pero se va

Sin embargo, ahí no acabó su carrera política. En 2015 volvió a la primera línea encabezando la lista de Ciudad Real en las elecciones municipales. Pero se quedó sin un acta de concejal al lograr únicamente el 2% de los votos. Vox no tenía tanto tirón entonces. Ante el fracaso, decidió darse de baja del partido en octubre. 

Tres años más tarde, cuando todos los sondeos sonríen a Vox, Chamorro ha reaparecido en el partido de Santiago Abascal. Su vuelta no ha sentado demasiado bien entre los mandos territoriales, que lo veían como un "mero afiliado" por haberse borrado del partido. La tormenta interna abierta en Vox Ciudad Real ha acabado con la dimisión de su presidente en la región, Casimiro Molina, quien aseguró que renunciaba por motivos personales y familiares.

Vuelve a Vox

Ahora Ricardo Chamorro se encargará de la gestora provisional que el Comité Ejecutivo Nacional debe ratificar en los próximos días. Su objetivo, insiste, es "remar todos en la misma dirección".

Preguntado sobre si Vox es un partido de extrema derecha, Chamorro dice considerarse "patriota español que queremos cambiar la situación de España". "Los que consideran a Vox como un partido de extrema derecha es gente extremadamente corrupta y extremadamente incoherente" [...] "Los adjetivos de los demás nos importan poco".