A gritos de "¡sí se puede, sí se puede!" fueron recibidos todos los participantes en el mitin, pero sobre todo Pablo Iglesias, tercer orador del mediodía en el mitin central de Adelante Andalucía, en Sevilla. Cuando subió al estrado a enardecer a las masas, el líder de Podemos ha sacado su vena euroescéptica, ésa que tenía olvidada pero que lo coloca en  el catálogo de los populismos que él mismo dice criticar: "¡Si Europa no mira hacia el sur, yo les digo a las élites que se acabó Europa!".

Después de agradecer "a la sangre de esta campaña, los imlitantes y los invisibles de los que no se habla en las campañas", el secretario general de Podemos ha tirado del carro euroescéptico aprovechando la crisis de Gibraltar para unir el fracaso de los Presupuestos Generales pactados con Pedro Sánchez con el rechazo a los mismos que esta semana han explicitado la Comisión Europea, el FMI y la OCDE.

"La Comisión Europea nos ha dicho que está muy mal que haya sanidad pública y educación pública, que el Salario Mínimo suba a 900 euros está muy mal y nos dice que está muy mal que los trabajadores tengan derechos", ha gritado Iglesias desde el estrado: "En Andalucía se juega el futuro de España, ¡que se lo recuerden a Casado a Rivera y al Primo de Rivera!", ha dicho ante una ovación tremenda.

Iglesias ha querido legitimar su discurso en "los valores fundacionales de la Unión Europea", los de la solidaridad y los derechos humanos, un argumento que también ha defendido Teresa Rodríguez después en su discurso. "Si Bruselas sigue siendo la de los mercaderes en modo neoliberal, ganan los Salvini, los fascistas" y, claro, "la derecha y la extrema derecha españolas".

La Constitución y el "momento crucial"

"Algunos peináis canas", ha recordado Iglesias, "y ahora se conmemoran los 40 años de la Constitución española". Así ha imbricado el tema de sus Presupuestos fracasados con el del momento actual. "Entonces, Andalucía no estaba invitada a las reuniones que inventaron aquel nuevo país, pero llegó el 4 de diciembre y se luchó contra las élites y un gobierno que miraba hacia el norte, ¡esta tierra se ganó su derecho a ser nacionalidad histórica!".

Cuando por fin su mitin llegó a Andalucía, Iglesias señaló a la candidata del PSOE, Susana Díaz, como una neoliberal escondida bajo las siglas socialistas. "¿Vosotros creéis que con Susana como líder del PSOE habríamos podido pactar esos Presupuestos?". Y ante el "¡no!" gritado desde la concurrencia, siguió: "Entonces, ¿no creéis que es imprescindible que gane Adelante Andalucía para asegurarnos políticas sociales en esta tierra?". Y ante el "¡sí!" gritado por las gradas, el líder de Podemos se vino arriba: "¡Es que ella quiso irse a Madrid! Y hoy el PSOE sería distinto, Andalucía es para ella un segundo plato... ¡y las políticas sociales también!".

El líder de Podemos, que este viernes provocaba el fin de la legislatura retirándole el apoyo al Gobierno de Sánchez, argumentó que las andaluzas son una primera vuelta de las generales "de adelanto inminente". Y así, ha comenzado este sábado su campaña personal por ganarse "a la militancia". Para ello, es tradicional en Iglesias endurecer el mensaje, recuperar los "tic-tac" revisionistas de la Transición y de todos son los enemigos menos nostros.

Así, reprochó a Sánchez no haber luchado por los PGE "en los que les habíamos arrancado tantas cosas buenas para la gente". Empaquetó a PP, Cs y Vox como "los tres trillizos de la derecha", a los que reprochó hablar de España en Andalucía: "Deben aprender que patriotismo es hablar de Andalucía en Andalucía, no de Cataluña". Y volvió a sacar de su chistera el argumento de que "éste es un momento de "encrucijada histórica, como hace 40 años", al aprobarse la Constitución.

Así, el enemigo también está en "las élites españolas y europeas" que no miran a los intereses de la gente, frente "a los patriotas pacotilla". Porque, ha dicho, "Europa mira al norte y las élites, y ha dejado de mirar al sur".