El Partido Popular de Pablo Casado atraviesa su momento más difícil cuando cumple se cumplen cien días desde que el nuevo presidente asumió su cargo. El día que se han filtrado las conversaciones entre el marido de la exsecretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, y el comisario Villarejo los conservadores han decidido que se estrene en la rueda de prensa de los lunes su vicesecretaria de Comunicación, Marta González, que se ha remitido al comunicado emitido por Cospedal para justificar, de momento, su respaldo público. "Los juzgados están abiertos para aquellos que consideren que estemos ante un delito", añadió. 

A la dirección nacional del PP no le constaba que López del Hierro hubiera intervenido para obtener información privilegiada sobre los casos de corrupción que asolaban al partido. Cospedal envió a Génova el comunicado antes de repartirlo ante los medios de comunicación, unas explicaciones "suficientes", de momento, para el equipo de Casado. Sin embargo, preguntada por EL ESPAÑOL sobre si el PP pone la mano en el fuego por su exsecretaria general, volvió a remitirse al comunicado emitido. 

González intentó diferenciar entre este caso y el de la ministra Dolores Delgado. "La exsecretaria general ha dado explicaciones con la máxima celeridad, sin intentar engañar a la opinión público. Nosotros nos remitimos a las declaraciones de Cospedal. De momento, la dirección nacional no se plantea interponer una medida disciplinaria contra su exsecretaria general e insiste en que su preocupación es  "mínima", "muy limitada". No obstante, no hay ninguna intención de que Pablo Casado hable sobre el asunto durante este lunes.