Pedro Sánchez y Pablo Iglesias se han reunido en la tarde del miércoles en la Moncloa para cerrar el acuerdo de los Presupuestos Generales del Estado para 2019. El Gobierno ya puede respirar tranquilo: cumplirá con el calendario marcado y presentará ante la Comisión Europea su plan presupuestario antes del 15 de octubre, tal y como se había comprometió. Pedro Sánchez reunió con el secretario general de Podemos tras regresar de Mallorca, donde visitó a los afectados por las inundaciones de Sant Llorenç des Cardassar.

El presidente del Gobierno u secretario general de Podemos han cerrado este miércoles un principio de acuerdo para los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019, tras la reunión que han mantenido en el Palacio de La Moncloa.

El documento pactado entre Unidos Podemos y PSOE está siendo revisado por los equipos de ambos partidos que han participado en las reuniones previas al acuerdo.

Fuentes de Hacienda han subrayado a Europa Press que el acuerdo no está cerrado del todo aunque está muy ultimado. En cualquier caso, se espera que el contenido del mismo sea anunciado a lo largo de este jueves.

Tres días de intensos contactos

La reunión en Moncloa, de la que no han informado previamente a los medios de comunicación, se ha producido después de tres días de intensos contactos entre el Gobierno y Podemos para salvar los escollos que impedían el acuerdo. De hecho, en las últimas horas la comunicación ha sido continua entre la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y el secretario de Organización del partido morado, Pablo Echenique, con reunión incluida.

Además, la propia Montero, que ha estado liderando las negociaciones y ha mantenido diferentes encuentros con dirigentes de Podemos, se ha reunido este mismo miércoles con el consejero de Economía, Hacienda y Administración Pública de Andalucía, Antonio Ramírez de Arellano.

También este miércoles se han reunido brevemente en Barcelona los vicepresidentes del Gobierno y de la Generalitat, Carmen Calvo y Pere Aragonès, antes de acudir a la entrega de los Premios Pimes de la patronal Pimec. "Hemos estado hablando de las posibilidades muy buenas para Cataluña que se abrirían en caso de que pudiéramos tener unos PGE", ha dicho Calvo.

"Cataluña podría manejar de una manera más amplia sus presupuestos. Estamos hablando de una cantidad importante, de 2.200 millones", ha declarado la ministra a los periodistas antes del acto.

Escollos

Uno de los principales escollos en las negociaciones ha sido el tema de la vivienda. En este sentido, la ministra de Hacienda ha adelantado este miércoles que los Presupuestos de 2019 incluirán cuestiones "muy importantes" respecto al acceso a la vivienda y el alquiler, para facilitar que los ciudadanos puedan continuar viviendo en los lugares habituales donde residen.

Según ha dicho, las nuevas cuentas públicas incluirán medidas relativas al acceso a una vivienda "digna" de los ciudadanos. "El Gobierno se va a comprometer con todas las políticas que afecten a los ciudadanos. En materia de alquiler hay mucho camino por delante", ha apuntado Montero al ser preguntada sobre si los PGE de 2019 incluirán medidas de regulación del precio del alquiler.

El Ejecutivo y la formación de Iglesias llevan desde el mes de agosto negociando las cuentas públicas y ambas partes preveían tener listo el acuerdo global esta semana, antes de mandar a la Comisión Europea, como tarde el 15 de octubre, las líneas generales del plan presupuestario.

Sin embargo, las negociaciones se estancaron el pasado fin de semana, después de que el Gobierno remitiera a Podemos una propuesta por escrito que resultó "decepcionante" para los 'morados', al no plasmar los compromisos verbales que, según Podemos, había manifestado el Ejecutivo.

El partido de Iglesias anunció el lunes que en ese momento estaban en el 'no', porque faltaban algunas de las medidas que consideran prioritarias y fundamentales, como las destinadas a pinchar la burbuja del alquiler, la subida del salario mínimo a 1.000 euros en 2019, la recuperación del subsidio por desempleo a partir de los 52 años y la provisión de fondos para pagar las ayudas de dependencia a los beneficiarios que no las cobran.