JuntsxCat y ERC han acordado una propuesta de resolución en la que, sin especificar ningún ultimátum ni plazo temporal, instan al diálogo "bilateral" con el Gobierno central "sin condiciones ni renuncias", para encontrar una solución "basándose en el derecho a la autodeterminación".

Así figura en una de las propuestas de resolución que JxCat y ERC han presentado conjuntamente de cara a la votación prevista para mañana, último día del Debate de Política General del Parlament.

Si bien ayer el presidente de la Generalitat, Quim Torra, fue taxativo al dar un ultimátum al jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez, para que en un mes pusiera sobre la mesa una propuesta para ejercer "el derecho a la autodeterminación" de Cataluña, la propuesta de resolución de las dos fuerzas independentistas que comparten su Govern no incluye plazos temporales.

El documento insta a un "diálogo de igual a igual, sin condiciones ni renuncias" con el Gobierno para resolver el conflicto catalán, con el fin de encontrar una solución que ponga "el futuro de Cataluña en manos de su ciudadanía, sin límites, ni coacciones, más allá del respeto a la democracia y a los derechos humanos, civiles y políticos y, por tanto, basándose en el derecho a la autodeterminación.

Así, insta al Govern a seguir "explorando las vías del diálogo y la negociación para garantizar el ejercicio al derecho a la autodeterminación", lo que incluye "negociar un referéndum acordado, vinculante y reconocido internacionalmente".

Reprobar al Rey 

Por otro lado, JxCat ha presentado también este miércoles una propuesta de resolución para que el Parlament repruebe "la actuación del rey Felipe VI y en particular su posicionamiento contra las instituciones catalanas y sus representantes legítimos en su discurso del día 3 de octubre de 2017".

La iniciativa, que se votará el jueves en el Debate de Política General, afirma que hay una mayoría de catalanes contrarios a la monarquía y quiere que el Parlament exija su "abolición".

JxCat considera que aquel discurso del Rey, del que justo este miércoles se cumple un año, supuso una "arenga a la violencia policial contra las catalanas y los catalanes que querían ejercer su voto y que fueron víctimas de aquella violencia intolerable" de la jornada del 1-O.