Unidas por Extremadura pasó este domingo de tres diputados a siete. La coalición de IU y Podemos -sin Sumar-, ha conseguido, en una única papeleta unitaria a la izquierda del PSOE capitalizar el descontento con el PP y apuntarse su mejor registro desde que se presentan a los comicios.
El ejemplo, sin embargo, no parece que vaya a tener eco en Andalucía. La izquierda a la izquierda del PSOE tiene, por ahora, tres candidaturas diferentes que amenazan con atomizar el voto y, por lo tanto, penalizar su representación en el Parlamento de Andalucía.
Según un dirigente de Por Andalucía, desde Podemos no lo ponen fácil. Según un representante de la formación morada, en Por Andalucía no les dan señales que justifiquen el acercamiento.
Entre todos la mataron y ella sola se murió, es el dicho popular. En este caso, la unidad de la izquierda no se muere sola porque, confirman desde los tres partidos en esta parte del espectro ideológico, una papeleta conjunta es un imposible.
Cuando el presidente de la Junta, Juanma Moreno, convoque las elecciones andaluzas habrá, como mínimo, dos papeletas a la izquierda del PSOE. Una será la de Por Andalucía -está por ver si con Podemos o no- y la otra, la de Adelante Andalucía.
Unión
Ahí no hay dudas. Ni los morados ni Por Andalucía van a unirse. No hay acuerdo posible, confirman los responsables de ambas formaciones.
La mejor opción para explorar algo de unidad estaría en la integración de Podemos en Por Andalucía, algo que ahora mismo no ocurre. Sin embargo, hay diferencias de base que hacen esto muy complicado.
Algunas de estas diferencias son políticas -"La cuestión no es ir juntos, la cuestión es para qué querríamos ir juntos", defiende un líder andaluz de Podemos- y otras personales -la relación dentro del grupo de Por Andalucía entre los morados y quienes están en Sumar o IU no son las mejores en estos momentos-.
Sobre la cuestión de Sumar, IU ya ha confirmado que la candidata de la coalición por Cádiz será Esperanza Gómez, quien es la cabeza visible de la formación de Yolanda Díaz en Andalucía. Blindan así su relación, que es uno de los problemas de Podemos para integrarse.
Así las cosas, el ejemplo extremeño está cada vez más lejos. Pero no es imposible. Porque, señalan desde Podemos Andalucía, hay cuestiones que podrían ayudar a coser los desgarros de la convivencia en un grupo que estos cuatro años en el Parlamento ha tenido sus más y sus menos.
¿Cómo qué? Fuentes de la dirección de Podemos señalan que Sumar es un problema. En Extremadura, recuerdan, quedaron al margen, pero en Andalucía ya se ha visto que es imposible esta cuestión. El reparto de espacios -físicos, en las listas, de participación, de exposición pública- es otro.
Suspicacias
¿Y qué dicen desde el otro lado? Hay algún que otro ojo en blanco. Cejas levantadas. Cierta sensación de haber pasado ya por esto cuando, en 2022, las negociaciones entre Podemos e IU se tensaron tanto que no se pudo registrar la papeleta conjunta ya que el 'placee' morado llegó tarde.
La hoy portavoz de Por Andalucía, Inma Nieto, pidió perdón por las caóticas negociaciones entre las fuerzas de izquierda en ese año electoral. Año en el que la formación pasó a tener solo 5 diputados desde los 17 que tenía en el periodo anterior.
El ejemplo de 2022, señala un dirigente de izquierdas, enseña que todo se puede fastidiar, pero también que Podemos negocia al límite. Ahí hay espacio, creen, para un posible acuerdo que, añade, no ven tampoco fundamental ni será "a cualquier precio".
Yolanda Díaz
De fondo, en la desavenencia entre Podemos y Por Andalucía, hay una cuestión muy concreta: Sumar. Los morados afean en público y privado a los de Yolanda Díaz que se mantengan en el Gobierno central tras los escándalos que lo cercan hace meses.
"¿Quieren que vayamos juntos para qué, para hacer como en Madrid, que se quedan en el Gobierno de Pedro Sánchez pase lo que pase?", señalan un dirigente de Podemos en Andalucía.
"No es un gran ejemplo que Díaz diga que quiere una reforma del Gobierno por los casos de acoso, no se haga y aquí no pase nada", añade.
Sea como fuere, hay tiempo. Al menos si el presidente de la Junta convoca en junio. Si es antes -por su decisión o porque el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adelanta-, les habrá pillado el toro. Y habrá tres papeletas para la izquierda.
Posturas
Porque Adelante Andalucía no se mueve un ápice de su postura. Ellos irán por libre y, además, las encuestas les sonríen. Los andaluces, aunque de forma minoritaria, ven con buenos ojos a su candidato, José Ignacio García.
Con solo dos diputados, tienen presencia mediática y propuestas que vota todo el Parlamento, como es el caso de las gafas de ver gratis, idea suya que ha llegado al Congreso de los Diputados gracias al apoyo de todos los grupos andaluces.
En el grupo están contentos. Saben que lo tienen difícil, pero sienten que no necesitan unirse para crecer. Esperan que su estrategia funcione y lo que dicen las encuestas se traduzca en uno o dos diputados más, sobre todo en Cádiz y Sevilla.
