La tractorada convocada por la organización agraria APAG Extremadura Asaja que partió el pasado 1 de abril desde Extremadura ha llegado este lunes a Bruselas, donde han mantenido una breve reunión con el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont.
La caravana agraria acudió a la capital belga con el fin de trasladar a eurodiputados españoles sus reivindicaciones sobre las políticas que afectan a su trabajo en el campo extremeño.
Tras pasar la noche en Waterloo (Bélgica) en la última etapa de su trayecto, los agricultores, que tenían previsto “pasar por delante de la casa de Puigdemont”, fueron recibidos por sorpresa por el presidente de Junts, que escuchó las reivindicaciones que trasladarán posteriormente a eurodiputados del PP y de Vox.
La tractorada extremeña culmina su recorrido en Bruselas con una reunión con Puigdemont
“Un grupo de agricultores extremeños se ha desplazado hasta Bélgica en tractor y han tenido la amabilidad de venir hasta Waterloo para expresarme su descontento ante la situación en la que se encuentra el sector agrario, no solo el extremeño”, ha publicado Puigdemont en sus redes sociales.
“El exceso de controles burocráticos, la competencia desleal desde el exterior y las limitaciones para poder llevar a cabo su actividad agraria dificultan la viabilidad de los agricultores”, añade en el comunicado.
‘Salvar el campo, salva Europa’
Bajo el lema ‘Salvar el campo, salva Europa’, reclaman cambios en la reforma de la Política Agraria Común (PAC) que verá la luz en 2028 y la solicitud de cláusulas espejo en los acuerdos comerciales de la Unión Europea (UE) con terceros países.
“Es momento de que se escuche nuestra voz, que se haga una apuesta por el sector primario y favorecer una mejora del presupuesto", ha explicado el presidente de APAG Extremadura Asaja, Juan Metidieri.
También quieren trasladar a los eurodiputados el rechazo a reformas como la Ley de Restauración de la Naturaleza, el Pacto Verde, la Agenda 2030 y la aprobación del acuerdo Mercosur-UE porque consideran que, con estas medias, les “está quitando campos de cultivos y granjas” y les venden placas solares y molinos eólicosç que les “cuestan más caros”.