El Ministerio del Interior, que encabeza Fernando Grande-Marlaska, ha respaldado la actuación de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en el asalto a la valla de Melilla ocurrido hace un año.

Fuentes de este departamento insisten en calificar como "irreprochable" la actuación policial y recuerdan que la Fiscalía abrió una investigación "corroborando" que "ningún hecho trágico tuvo lugar en España".

Ahora bien, las mismas fuentes, en declaración a las agencias Efe y Europa Press no han desmentido en ningún caso una de las principales conclusiones del informe publicado este viernes por Amnistía Internacional: que los migrantes muertos fueron más de cien, lo que quintuplica la cifra oficial.

"En España se llevaron a cabo investigaciones de forma exhaustiva e independiente, pero no validaron sus postulados y prejuicios, por eso para ellos no son válidas", han indicado fuentes de Interior.

En su dosier, Amnistía Internacional ha recordado que el 24 de junio al menos 37 personas murieron en Melilla y continúan en paradero desconocido, al menos, otras 76.

"Varias personas que fueron trasladadas en autobús sin recibir ningún tipo de asistencia médica, a pesar de la gravedad de las lesiones, murieron durante el viaje. Otros fueron abandonados a su suerte en el sur de Marruecos. Muchos de ellos siguen desaparecidos, puesto que sus familiares no han tenido noticias de su paradero", recoge el informe.

No obstante, según Interior, las investigaciones llevadas a cabo en España por la Fiscalía se hicieron "con todas las garantías y con toda la profundidad" y "corroboraron lo mantenido por el Ministerio del Interior: que ningún hecho trágico tuvo lugar en España y que la actuación de los agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado fue irreprochable".

El pasado mes de diciembre, el Ministerio del Interior también volvió a criticar a Amnistía Internacional por sus afirmaciones "falsarias" y de "extrema gravedad" acusando a la Guardia Civil de participar en supuestas torturas durante el dispositivo por la tragedia de Melilla del pasado 24 de junio. La ONG acusó a España y Marruecos de cometer "crímenes de derecho internacional".