La ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría, ha confirmado este jueves a los sindicatos de profesores y las comunidades autónomas su intención de implantar una prueba específica para poder acceder a la carrera de Magisterio, tal y como había adelantado EL ESPAÑOL en el mes de noviembre.

Alegría ha recogido el guante lanzado por la Conferencia de Decanos y Decanas de Educación quiénes ya adelantaron que esta prueba sería beneficiosa para el alumnado e imitaría modelos de éxito como el finlandés.

La propuesta de mano de Educación ha llegado a las autonomías con motivo del primer borrador del Estatuto Docente. El documento que pretende un cambio total a la profesión docente y que intentó ponerse en marcha en el año 2007 pero se paralizó.

Ahora, Alegría abre las negociaciones siguiendo las exigencias autoimpuestas por la Ley Celaá que obligaba al Ministerio de Educación a elaborar un Estatuto del Personal docente al año de estar vigente la nueva norma educativa.

Según han explicado los sindicatos tras la primera reunión, la idea del departamento de Alegría es dividir el Estatuto Docente en diferentes bloques para poder negociarlos de manera separada. Es decir, por un lado, se pondrá en marcha la futura prueba para acceder a la carrera de magisterio y, por el otro, la transformación de los currículum de los grados (tanto de Infantil como de Secundaria).

Otra de las propuestas que ha llegado a la mesa de las autonomías es ampliar la duración del máster de profesorado (para ejercer de profesor de Secundaria, Bachillerato, FP y Escuelas Oficiales de Idiomas) con más parte práctica y pruebas específicas.

Además, se ha propuesto revisar cómo es el sistemas de práctica de un alumno de Magisterio. Por el momento se descarta el modelo MIR, pero sí se apuesta por más presencia práctica y remunerada.

Prueba específica

No se sabe mucho de la prueba específica que plantea el Ministerio de Educación, aunque se pretende evaluar dos aspectos: "la competencia comunicativa y razonamiento crítico" y "la competencia lógicomatemática". También incluirá (aunque no se sabe con qué peso) aspectos referidos a "actitudes y competencias de la profesión docente recogidas en el marco de competencias profesionales docentes".

En estos momentos, a la carrera de Magisterio se accede tras la selectividad y es una de las formaciones con una nota media más baja. Lo que busca Alegría y le pedían los decanos era buscar la excelencia de los futuros docentes.

Li mismo ocurrirá en el acceso al Máster en Formación del Profesorado (para dar clase a mayores de 12 años). Hasta ahora era necesario cursar la formación tras acabar una licenciatura, pero se habla de, de nuevo, volver a hacer una prueba.

Para este tipo de docentes, lo que Alegría ha propuesto es establecer "unos requisitos básicos relacionados con el área de conocimiento de dicha especialidad", los cuales podrán consistir en "módulos formativos complementarios de carácter disciplinar". Junto a eso, se añadiría una prueba de acceso similar a la propuesta que se ha realizado a los Grados en Educación Infantil y Primaria".

Nuevos temarios

El documento de propuestas al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL recoge la modificación de los temarios durante el proceso de la oposición, en cualquiera de las etapas educativas. Alegría plantea incorporar "aspectos referidos al funcionamiento de los centros, el sistema educativo en su conjunto, la atención a la diversidad, etc".

Otra novedad que plantea el Ministerio es que la especialidad cursada en el Máster sea vinculante para el acceso a la función pública docente. Es decir, que dicha especialidad elegida en el Máster sea a la que pueda aspirar el estudiante para acceder a los cuerpos docentes de enseñanza secundaria. Ahora el aspirante puede cursar a cualquier especialidad en la oposición, pero con su modificación deberá esperar a que salgan plazas de la suya. 

Para ampliar este proyecto, Educación también ha planteado la posibilidad de relacionar la especialidad del Máster con el acceso a la carrera docente, en el caso de los centros privados. Allí instarán a revisar la normativa que regula las condiciones de formación inicial del profesorado para que también se les exija el máster específico. 

Hablar de sueldos

Aunque el documento es un primer borrador que se irá modificando con el paso de los meses, ha sido recogido con buenas palabras por la mayoría de los sectores, incluidos los sindicatos. 

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha aplaudido el trabajo del equipo de Alegría y, a su vez, ha reclamado mejoras en las condiciones laborales y retributivas del profesorado.

A juicio de CSIF, el Ministerio debe centrar el debate en la necesidad de potenciar el sistema educativo en su conjunto, "reforzar las plantillas y, en definitiva, revertir los recortes de 2012, aún vigentes y que se han evidenciado a la sociedad por su efecto durante la pandemia".

CSIF entiende que el futuro Estatuto Docente debe enfocarse como "una ley básica que regule toda la profesión docente, desde sus inicios hasta la jubilación". "El profesorado es el pilar de la educación pública y la dignificación de su labor y el reconocimiento de sus retribuciones deben ser también la base de una educación de calidad, que debe alcanzar una inversión del 7 por ciento del PIB", explican.

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