Granada

Luis Salvador (1963, Córdoba) mantiene una planta atlética de su época de juventud. Está en forma y camina tranquilo. Hemos quedado muy temprano, a una hora casi insultante para verse un sábado para trabajar en una ciudad como Granada. La plaza de la Caleta está casi desierta. Un grupo de chavales se acerca al bar… No vienen de trabajar. Vienen de fiesta.

El alcalde de Granada aparece por las escaleras del parking público. "Buenos días"... Vaya horas. Son poco más de las 7:45 de la mañana y ya está en marcha. Están siendo días convulsos en el Ayuntamiento. El miércoles empezaba el lío: Sebastián Pérez abandonaba el PP. Su salida deja al equipo de gobierno de la ciudad herido de gravedad. Al menos en su conformación actual. Pérez ha sido la china en el zapato de Salvador, pero también de los populares que ahora, sin él, sueñan con ocupar la alcaldía.

Hablamos primero sobre Granada. Sobre su futuro. "Los dos años como alcalde los voy a cumplir, claro. Es casi imposible porque quedan dos semanas para eso", responde a la primera pregunta. Aunque aclara que "en política hay que vivir día a día".

Toca referirse a Sebastián Pérez: "Un tránsfuga". No lo duda. De hecho, esa condición es la que le hace estar aparentemente tranquilo. Luis Salvador transmite mucha calma: "Si el PSOE se apoya en Pérez para cambiar al equipo de gobierno estaría incumpliendo el pacto antitransfuguismo".

¿Le da miedo que Pérez le dé el gobierno al socialista Paco Cuenca? "No, un tránsfuga no puede propiciar un cambio de gobierno", es directo. 

Sin embargo, cabe la posibilidad de que Salvador deje de ser alcalde, y es que el cambio se produzca dentro del propio equipo. Pérez lo anunció, quería un alcalde del PP... pero no le gusta el que han propuesto. Luis González, concejal popular, no contaría, en principio, con el apoyo del exconcejal. 

Granada perdería dinero, afirma Salvador, si él deja de ser alcalde: "Al menos hay veinte millones de euros de la FEMP que se perderían. Si trasladamos la confrontación de bloques que hay en España al ámbito andaluz, la ciudad se paralizaría".

La mano de Hervías

Alcalde, ¿ve la mano de Hervías detrás de esto?

Yo lo único que puedo decir es que Sebastián ha afirmado que Hervías le ha llamado haciéndole una propuesta. Se la hizo desde el PP y en nombre del partido. Lo ha dicho

¿Hasta dónde puede llegar Hervías en esto?

Yo respeto profundamente a Fran. En primer lugar, creo que nos debemos a que haya buenos gobiernos en las instituciones. En segundo, conseguir los objetivos para Granada. Empleo y salud. Estoy seguro de que el PP no va a permitir que se ponga en peligro la gestión de intereses para el partido.

Pero cuando el PP ficha a Hervías, sabe lo que trae a casa.

No hablo sólo de Fran. Es el PP en su conjunto quien debe dirimir qué es lo mejor para hacer las cosas. Aquí no se está cuestionando que estemos haciendo mal las cosas y que haya cambiar el gobierno. Se está cuestionando cuál es la mejor estrategia para que Sebastián Pérez no cumpla sus amenazas y tumbe este gobierno.

El PP piensa que si hay un cambio de alcalde, su exconcejal lo aceptaría. Yo lo que pienso es que Pérez no puede hacer una moción con el PSOE porque está blindado por el pacto antitransfuguismo: yo no tengo el temor a que pueda gobernar otro partido. Mi temor es que Pérez ponga condiciones de última hora que lleven a un cambio de gobierno.

Hace un mes aproximadamente, Hervías le llamó traidor y afirmaba que usted le había utilizado para su propio beneficio.

Yo formo parte del grupo impulsor de Movimiento Ciudadano. Viajé por toda España con él, trabajamos en la expansión del partido: junto con Juan Marín, nos dividimos Andalucía para crecer. Fran y yo hemos tenido mucha unión, hemos constituido juntos por la comunidad muchas agrupaciones de Cs. He tenido una buena relación con él. Cualquier cuestión personal… yo no diría nunca esas palabras de él.

Para usted, ¿Hervías no es un traidor?

No, no diría eso. Nunca lo diría de nadie. El que hayamos podido tener diferencias no nos convierte en traidores. Si él dice eso es porque no le estaba haciendo seguidismo.

¿Hervías ha vendido a Ciudadanos?

Ahí no quiero entrar a cuestionarlo. Cada persona es libre de hacer lo que quiera, pero alguien que pasa a formar parte de otras siglas lo que debe hacer es trabajar para su nuevo partido, sumar y hacer el proyecto cada vez más grande, pero no creo que el mejor camino sea desmontar el proyecto del que tienes información privilegiada.

Dejamos el tema de Fran Hervías. No son pocos los granadinos que ven en el exsecretario de organización de los liberales la mano del lío formado en Granada. Hay, incluso, quien habla de una relación "podrida" entre Hervías y Salvador, lo que hace que el ahora militante popular "le tenga ganas".

Futuro de Cs

El alcalde es uno de los miembros más antiguos del partido en Andalucía. Podría decirse que es casi una criatura suya. Por eso debe hacérsele complicado ver la situación en la que está aquel proyecto en el que cada vez quedan menos de sus fundadores.

¿Qué implica para Ciudadanos que usted pierda la alcaldía?

Si dejo de ser alcalde, el partido pierde a uno de los cinco portavoces de la junta. Además, Granada pierde voz y pierde influencia en la FEMP, el máximo órgano del municipalismo.

¿Qué va a quedar de Cs en unas próximas elecciones?

Inés ya ha avisado de la próxima convención en julio. Yo quiero lanzar un mensaje sencillo y es que nadie ha cuestionado el centro liberal progresista de Ciudadanos. Somos los únicos que representamos eso y se nos reconoce que cuando Cs está en un gobierno, el gobierno funciona mejor. Lo que está en cuestión es si Cs va a seguir representando este espectro o vendrán otros a intentar apropiarse de ese espacio.

¿Es Arrimadas quien puede sacar del pozo a Ciudadanos?

Considerando que esté en el pozo, Inés tiene todas las condiciones de liderazgo necesarias para generar ilusión y conseguir que el proyecto de Ciudadanos llegara a regenerarse. Igual que Juan Marín, que ha demostrado en Andalucía cómo nos adaptamos a las circunstancias.

Ya hay un partido que está captando a personas de ese centro. Gente de Ciudadanos que está desembarcando en el PP. ¿Acabará Cs dentro de los populares?

Esas decisiones son de una dirección nacional. Como el asunto de la alcaldía de Granada. Esa es una decisión que no depende de este alcalde ni del grupo municipal. Nos escuchan a nosotros, pero es una decisión estratégica.

En el caso de que el PP deshaga el pacto firmado hace dos años para gobernar Granada, ¿se estaría aprovechando de la debilidad de Ciudadanos?

Si Cs no estuviera pasando el momento en el que aparece en las encuestas, no se producirían estos movimientos. Pero yo pido respeto. Principalmente para los votantes de este partido que ha mejorado la política en España. Lo estamos demostrando en Andalucía y en Granada. Hemos mejorado lo que había antes.

Los proyectos en marcha

A Luis Salvador se le llena la boca al hablar de Granada. Consiguió aprobar los primeros presupuestos "después de siete años". Era una necesidad, dice, pero consiguió unir 24 de los 27 votos del Pleno. Es buen negociador, aunque no lo reconoce directamente.

Ha pactado a izquierda y derecha y eso le ha permitido poner en marcha dos grandes proyectos: la capitalidad cultural europea de Granada en 2031 y el cinturón verde que aumentará en más de 200.000 los árboles de la ciudad.

SmartCity, innovación, captación de fondos... Ideas desarrolladas por el actual equipo que buscan volver a poner a Granada en el centro de grandes proyectos. Una ciudad que ha sufrido en el último año los efectos más duros de la pandemia en una capital andaluza (sobre todo tras el puente de octubre) y un enjambre sísmico que hizo temblar a toda la provincia.

Ahora el terremoto está en la plaza del Carmen, donde se encuentra el Ayuntamiento de Granada. La mano de Fran Hervías ha decidido que era el momento de remover la ciudad nazarí y al culebrón le quedan algunos capítulos. 

Noticias relacionadas