Ayman Adlbi, presidente de la Comisión Islámica de España (CIE), el tesorero de la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE) y una tercera persona vinculada a la primera de estas entidades habrían desviado presuntamente "miles de euros" de donaciones a una ONG para financiar el adiestramiento de niños como futuros guerreros de la yihad o guerra santa.

Una parte de ese dinero, legado de forma altruista por multitud de donantes como ayuda humanitaria para Siria, habría estado finalmente sufragando los gastos de un centro para niños huérfanos situado en zona de conflicto y cuyas actividades se centraban en el adiestramiento de jóvenes muyahidines.

Según revelan a EL ESPAÑOL fuentes de la investigación, los chicos de ese centro eran en su mayoría hijos de hombres muertos en combate. Allí se les estaría adoctrinando en la versión más radical de la Sharia una filial de la organización terrorista Al Qaeda les entrenaba en la lucha armada.

Estas son, por ahora, algunas de las conclusiones de las investigaciones realizadas por la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, a raíz de las cuales la Audiencia Nacional ordenó la detención de los tres miembros de la Comisión Islámica de España y la entrada y registro de sus domicilios y despachos.

Los propios investigadores aclaran que su informe se centra en personas concretas, que no se cuestiona por tanto la institución, el máximo órgano coordinador de las comunidades religiosas islámicas y principal órgano de interlocución del Islam con la Administración. 

Financiación del terrorismo

El juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea sólo ordenó el ingreso en prisión del tesorero de la Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE) al entender que en su caso concurría el riesgo de fuga. Para los otros dos investigados, el presidente de la CIE y el tercer implicado, el magistrado estimó que dada su avanzada edad y precario estado de salud no era preciso decretar la misma medida.

La detención de uno de los integrantes de la trama. Policía Nacional

Desde la Comisaría General de Información se insiste en que las pruebas recabadas demuestran que los detenidos conocían a la perfección a dónde iba a parar el dinero de la ayuda humanitaria.

Aunque los investigadores sitúan al tesorero como el mayor conocedor de la trama (al ser él el más próximo a la gestión del dinero de la Comisión Islámica de España), las pruebas que obran en poder de los agentes les permiten determinar que los tres habrían incurrido en un presunto delito de financiación del terrorismo.

Los agentes, tras dos años de indagaciones en colaboración con organismos internacionales como Europol, lograron averiguar que dichas actividades delictivas estarían desarrolladas por personas vinculadas a un centro islámico de Madrid. Ese dinero se remitiría desde la CIE a una ONG establecida en territorio sirio. 

Después de la recaudación de esas aportaciones realizadas de buena fe por allegados al centro islámico Mezquita de Abu Bakr -situado en la calle de Anastasio Herrero de Madrid-, una parte de ese dinero se estaría haciendo llegar de forma opaca a las arcas de una ONG denominada Organización Humanitaria Al Bashaer a Al Basdyer Insani Yardim Dernegine.

Las indagaciones de los agentes apuntan a que aquella ONG, que prestaba supuestamente ayuda humanitaria a huérfanos sirios, estaría realmente vinculada a la organización yihadista Yeish al Islam (Ejército del Islam)un grupo terrorista que llegó a operar como filial de Al Qaeda en Siria. Era esta organización la que se encargaría de instruir a los menores en los dogmas más extremistas y en las técnicas de combate de la yihad.

Respuesta de Adlbi

El actual operativo, desarrollado a principios de esta semana, sería una derivada de la operación Wamor. En junio de 2019, la Comisaría General de Información desarticuló una red que se dedicaba al envío de fondos a Siria y a otras zonas de conflicto para sufragar presuntamente acciones armadas de grupos radicales.

Ayman Adlbi, en un acto reciente como presidente de la CIE. Centro de la Guerra Ideológica del MOD Saudí

Después de su detención, Ayman Adlbi, médico sirio y presidente de la Comisión Islámica, emitió un comunicado en la página web de la organización en el que subrayaba su "gran disgusto por que se hayan producido estos hechos hasta el extremo de la detención, cuando se podría haber resuelto con entrevista en la sede de esta Presidencia o Comisaría".

También quiso expresar su "confianza" en la Justicia, pese a que considera que "las sospechas" sobre él son del todo "infundadas".

Adlbi rechaza en su comunicado "las sospechas acusatorias, lejanas y ajenas al sentir y trabajo religioso islámico". "Continuamos a vuestra disposición, fieles y sociedad en general, desde nuestros puestos de trabajo en una labor como hermanos y conciudadanos con intereses comunes, por la paz y el progreso", concluye. 

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