Tantas preguntas como evasivas. María Jesús Montero trataba de zafarse este martes, durante su habitual rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, de la polémica desatada por el veto de Mohamed VI a Pedro Sánchez, al que no recibirá en el marco de la Reunión de Alto Nivel (RAN) con el vecino del sur, que tendrá lugar el próximo día 17.

La portavoz del Gobierno llegaba incluso a escudarse en el protocolo anti Covid para tratar de justificar el que se no produzca esa entrevista entre el jefe de Estado del vecino del sur y el jefe del Ejecutivo. "Habrá que esperar a ver si la limitación de la movilidad va a impedir que la delegación se pueda desplazar con absoluta normalidad" argumentaba.  

Al mismo tiempo, Montero negaba tajantemente que exista enfado del monarca por la postura pro saharaui del vicepresidente Pablo Iglesias. Desde hace semanas el líder de Podemos viene reivindicando un referéndum de autodeterminación, en línea con las resoluciones de la ONU pero inmiscuyéndose en competencias que le son ajenas dentro del gabinete y que comprometen la posición del mismo. 

"No hay ningún tipo de lamento o de queja por parte del Gobierno de Marruecos" afirmaba la también ministra de Hacienda ante las preguntas insistentes de los informadores. 

En todo momento Montero subrayaba la "gran ilusión" por la celebración de la RAN, que no se produce desde hace cinco años, en tiempos del presidente Rajoy. Igualmente, calificaba de "fluida" la relación entre ambos países y recordaba que Mohamed VI recibió a Sánchez en 2018, "nada más llegar a la presidencia".

Omitía, sin embargo, que ni cuando ganó hace dos años la moción de censura ni cuando este mismo 2020 logró la investidura gracias a su acuerdo con Podemos y los separatistas, el presidente cumplió con la norma no escrita de que el primer viaje al extranjero de un inquilino de La Moncloa es siempre a Rabat.

Lo cierto es que la cumbre de mediados de este mes llega en un renovado clima de tensión bilateral, y no solo por la postura de Podemos sobre el Sáhara, la antigua colonia española. La opinión pública, como evidencia uno de los últimos sondeos de SocioMétrica para EL ESPAÑOL, vincula la afluencia de inmigrantes a nuestras costas, como se ha puesto dramáticamente de manifiesto en el campamento de Arguineguín, en Gran Canaria, con maniobras cómplices de la dictadura alauí. 

En anteriores ediciones de la RAN, instauradas a principios de los años noventa, Mohamed VI recibió a los tres antecesores de Sánchez en La Moncloa. Tanto José María Aznar (Marrakech, 2003), como José Luis Rodríguez Zapatero (Rabat, 2007) y Mariano Rajoy (Rabat, 2012) tuvieron esa entrevista con el monarca que ahora, salvo cambio en los próximos días, no se producirá.