Este lunes ha tenido lugar una nueva fuga de inmigrantes que se encontraban en cuarentena en la Región de Murcia. En esta ocasión, ocho argelinos, que estaban aislados por haber estado en contacto con enfermos de Covid-19, han escapado por los conductos de ventilación del Pabellón Cabezo Beaza de Cartagena y se suman ya a los más de 50 que se encuentran en paradero desconocido desde la semana pasada.

En plena madrugada, los vigilantes de seguridad del pabellón se alarmaron después de escuchar varios ruidos en los conductos del edificio. Al acudir al lugar, pudieron comprobar que uno de los individuos se estaba escapando, pero no fue hasta realizar un recuento exhaustivo cuando confirmaron la ausencia de ocho de los integrantes del grupo. 

Todos ellos se encontraban aislados debido al contacto directo con enfermos de Covid-19 durante los traslados en patera. Como viene siendo ya habitual en estas intervenciones, los inmigrantes estaban ubicados en estas instalaciones para pasar los 15 días de cuarentena pertinentes, hasta poder comprobar si se encuentran infectados o no. Es por ello que las autoridades avisan de la urgencia de dar con ellos lo antes posible, con el fin de poder evitar una posible propagación del virus.

Decenas de inmigrantes argelinos durmiendo pegados en el suelo pese a los riesgos de contagios por Covid-19.

La huida ha tenido lugar apenas 48 horas después de que lograsen escapar más de 50 migrantes del mismo pabellón de la localidad de Cartagena. Entonces, la Delegación de Gobierno logró localizar al menos a 17 de los fugados y ahora continúan la búsqueda con estas nuevas incorporaciones a la lista de desaparecidos.

Todos ellos se unen también al centenar que ya logró escapar de las instalaciones provisionales de la Cruz Roja, en la dársena de Escombreras el pasado miércoles. Entonces, las autoridades de la región lograron dar con la mayor parte del grupo y pudieron localizarlos en nuevas instalaciones -con las condiciones necesarias para poder pasar el resto del aislamiento-. La mayoría de ellos fueron ubicados precisamente en el Pabellón Cabezo Beaza -ya que Cartagena es de las pocas localidades que está dando su apoyo para solventar esta crisis- pero se desconoce si se trata de huidos reincidentes o si son nuevos individuos.

La llegada de embarcaciones no cesa y la Delegación de Gobierno se encuentra sobrepasada con esta crisis migratoria. A comienzos del fin de semana pasado, el avión del Frontex (la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas) pudo detectar otras "500 pateras preparadas para zarpar desde Argelia". Por lo que a lo largo de estos días se espera una oleada de nuevos inmigrantes en las costas del país.

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