"Esto es un país en el que no te puedes morir en catalán. Es una puñetera colonia. No consentiremos humillaciones en nuestra propia casa. Iremos donde haga falta". La situación es insólita: un grupo de activistas independentistas acorralan al doctor Bonavent en el centro médico Les Corts de Barcelona para pedirle explicaciones por unos hechos que se remontan al pasado 18 de septiembre.

Son, al menos, nueve radicales que graban, amenazan y exigen, como si se tratara de un tribunal público, al doctor Bonavent que justifique por qué una doctora atendió en "lengua castellana" a una paciente el pasado mes de septiembre. Dirigiendo al grupo está Santiago Espot, un conocido empresario, escritor y activista por la independencia que se sitúa al lado del médico y le señala que el hospital ha "incumplido" la "ley de política lingüística y el Estatuto de Cataluña".

Amenazas en un centro médico por hablar español

Espot se refiere a la denuncia de una madre que acudió al centro médico con su hija discapacitada psíquica. La progenitora sintió que tanto ella como su hija enferma habían sido "humilladas" en Urgencias. "Si hubiera sido por mí me habría ido, pero la que sufría era mi hija. Tuve que estar traduciendo la consulta al castellano para la médica y en catalán para mi hija", relató la afectada a RAC1. "Médica colonizadora", se refieren a ella los acompañantes de Escot. 

La situación descrita por la madre levantó las iras del separatismo. Los vídeos han sido difundidos por una asociación separatista de ultraderecha, Movimiento Identitario Catalán, y por el propio Espot. El doctor Bonavent mantiene una actitud en cierto modo irónica ante la lluvia de reproches provocada por la rabia identitaria de sus interlocutores, que lo rodean en una habitación. "¡Aquí vienen médicos con el ánimo colonizador a menospreciarnos, no sólo esta médica sino otras muchas!", reclaman visiblemente alterados los responsables del escrache.

En el vídeo se aprecia cómo Espot sube el tono de sus reproches. "¡Que esto no se vuelva a repetir aquí! ¡Esto no se volverá a repetir aquí!". Sorprendido por la situación, el doctor Bonavent intenta defenderse. "Los médicos extranjeros hacen esfuerzos por aprender las lenguas oficiales. La doctora entendía perfectamente el catalán", reconoce, enfadando, aún más, a los inpedes que lo rodean.

"¿Entonces reconoce que quiso humillar a la paciente?", pregunta a continuación otra de las participantes en el escrache. "Aquí no se ha discriminado a nadie", intenta explicarse el médico interpelado. "Ustedes son como un tribunal", les dice. La misma voz contesta con sorna: "¡De la Inquisición!". Bonavent trata de calmar los ánimos. "No entraré en detalles de lo que pasó en una entrevista clínica, pero sí les diré que nunca hemos tenido problemas de este tipo". 

El momento más surrealista del escrache se produce cuando los acosadores preguntan al médico "si han echado ya a la doctora". “¡Solo faltaría!”, contesta el médico que todavía no entiende qué pretenden los activistas con esa actitud. Acorralado bajo los gritos de los independentistas, el vídeo ha provocado polémica en las redes sociales. Jordi Cañas, eurodiputado de Ciudadanos, tras compartirlo, ha comparado a los radicales con "la gestapo". "Cataluña 2019. La gestapo lingüística amenazando y coaccionando a profesionales, funcionarios, empresas y trabajadores".

"Muchos de nuestros abuelos catalanoparlantes las últimas palabras que escucharán serán en castellano. Los catalanes somos muy generosos. ¡Dejad que hablen en castellano! Fíjese si somos generosos", llegan a decir los separatistas. 

Plataforma per la Llengua viene denunciado desde hace unos años "discriminación linguísticia" en los hospitales y ambulatorios catalanes. La ong considera que esas situaciones "vejan de forma sistemática" a la población. 

La entidad contabiliza las quejas y, según las denuncias recibidas, en 2019 ya se han superado los registros de quejas de años anteriores con 26, las mismas que en todo 2018 y diez más que en 2017.