Daniel Basteiro Alberto D. Prieto

Choque de trenes. La cuarta reunión entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias desde las elecciones generales concluye sin acuerdo y con una dureza retórica creciente. El líder del PSOE y el de Unidas Podemos se han reunido en la tarde de este martes durante una hora en el Palacio de la Moncloa. Se ha tratado de un encuentro fuera de agenda que ha trascendido horas antes de su celebración. 

"Pablo Iglesias no ha variado su posición manteniendo su exigencia de un Gobierno de coalición. No ha descartado votar en contra de la investidura", han asegurado fuentes socialistas. "Le hemos traslado que con o sin apoyos en el mes de julio habrá investidura", añaden. 

Reproches cruzados

"El PSOE no ha decidido si quiere un acuerdo con la izquierda o con la derecha para sacar adelante la investidura", lamentan por su parte fuentes moradas. "No vamos a entrar en disputas sobre sillones grandes o sillones pequeños", añaden. "Si el PSOE mira a la izquierda, estamos disponibles para iniciar, cuanto antes, una negociación seria para lograr un programa social que ponga en el centro los derechos sociales y medioambientales y un gobierno de coalición estable". 

La composición del Consejo de Ministros sigue separando a Sánchez e Iglesias hasta el punto de haber bloqueado toda la negociación. Entre ellos parece mediar un abismo político. El PSOE ofrece un "Gobierno de cooperación" en el que Sánchez gobierne desde el Consejo de Ministros y Unidas Podemos coopere, integrando segundos o terceros niveles de la administración aún no concretados por los socialistas. 

Una comisión de seguimiento

Según el PSOE, este martes Sánchez ha propuesto una "Comisión de seguimiento al posible acuerdo de gobernabilidad" para garantizar que las prioridades políticas moradas salen adelante. Además, los socialistas insisten en que una coalición sólo podría plantearse si juntos sumasen mayoría absoluta, algo que no ocurre. Esa es, según Ferraz, la principal diferencia con otros pactos de gobierno, en el ámbito autonómico o municipal, donde sí hay reparto de grandes áreas. 

Pero Unidas Podemos insiste en que sólo con ellos en el Gobierno se pueden garantizar sus medidas y relatan un rosario de incumplimientos de los socialistas de los acuerdos firmados hasta ahora. Además, recuerdan que sus 42 escaños son imprescindibles para un Ejecutivo de izquierdas y que sus votantes no entenderían otra posición. 

"Hemos transmitido al candidato del PSOE que debe decidirse y que España necesita un gobierno estable y de izquierdas, y que la ciudadanía merece claridad y certidumbres respecto al proyecto de gobierno que se tiene para el país", según fuentes moradas.