Javier Lambán, líder del PSOE en Aragón y presidente regional, está muy cerca de repetir como jefe del Ejecutivo regional. Lambán ha llegado a un acuerdo de gobierno con el Partido Aragonés (PAR) y su presidente, Arturo Aliaga, arrebatándo así la posibilidad de conformar una mayoría absoluta a PP, Ciudadanos y Vox.

El acuerdo al que Lambán y Aliaga han llegado hoy encarrila la investidura del candidato socialista, aunque no la sella. El PSOE fue la fuerza más votada en Aragón el 26 de mayo y logró 24 escaños, que junto a los tres del PAR suman 27.

Para gobernar, el PSOE y el PAR deben buscar más apoyos hasta llegar a los 34 diputados, umbral de la mayoría absoluta. Pueden recurrir a Ciudadanos, que tiene 12, y disponer de una amplia mayoría de 39. Pero también podría buscar un pacto de izquierdas con Podemos-Equo (5), Chunta Aragonesista (3) e IU (1), con quien sumaría 36, dos más de la mayoría absoluta. 

Muy difícil para el PP

Que Lambán haya pactado con el PAR es muy relevante porque pone muy difícil al PP lograr la presidencia. Sin el PAR, la suma con Ciudadanos y Vox es de 31 escaños y una hipotética candidatura a la investidura probablemente cosecharía el "no" de todos los demás. Por otra parte, Ciudadanos mantiene un veto a Vox que complica toda negociación. 

"El acuerdo con el PAR es inamovible", ha dicho Lambán esta mañana tras cerrar el acuerdo con el PAR. Ahora, el PSOE hará llamadas "en todas las direcciones" para completar su apuesta, según el presidente en funciones.

Para Aliaga, el nuevo Ejecutivo se basará en "la centralidad, la moderación, la transversalidad" y el trabajo por el futuro de la comunidad. "A partir de ahora, los contactos con otras fuerzas políticas para seguir ampliando ese gobierno los mantendremos conjuntamente Arturo Aliaga y yo", ha dicho el presidente en funciones.

Lambán es, con diferencia, el barón socialista al frente de un Ejecutivo autonómico menos afín a Pedro Sánchez, algo que podría atraer el apoyo de Ciudadanos. El carácter de centroderecha del PAR también podría tranquilizar a Ciudadanos. 

Sin embargo, el PP espera poder disuadir al PAR de su pacto con los socialistas ofreciéndoles importantes contrapartidas y puestos en el Gobierno regional.