Con un gran acento en Europa, la transición ecológica, la redistribución y la productividad, Pedro Sánchez ha presentado este sábado las líneas generales de su programa para los próximos cuatro años. 

En su discurso, que sirvió para clausurar la XXXV edición de la convención anual del Círculo de Empresarios, Sánchez pidió a los empresarios que se animen a "soñar" con una España nueva que dé oportunidades a sus ciudadanos, goce de cohesión social y territorial y sea competitiva en el mundo. 

Pero la pregunta era obligada y se la hizo Juan José Bruguera, presidente del Círculo y de la inmobiliaria Colonial. Bruguera aseguró que el empresario tiene "preocupación" por que la lucha contra la desigualdad que propone el PSOE no incluya "cargas fiscales insoportables". "En fin, a los empresarios nos toca pedirle al presidente del Gobierno que baje impuestos". 

Sánchez ante los empresarios: "La política fiscal no es un fin, es un instrumento"

Sánchez no respondió a la pregunta, consciente de que ha prometido en campaña subir los impuestos. Así consta en el borrador enviado a Bruselas sobre la senda fiscal de los próximos años. 

"Puedo garantizar es que la política fiscal que hagamos estará alineada con un objetivo vital para nuestro país: el crecimiento económico", ha dicho. Se trata de "crecer para redistribuir", según él. En ese sentido, "la política fiscal no es un fin, es un instrumento". "Necesitamos a los empresarios", vitales para el "crecimiento, productividad y competitividad". 

"Acabar con la pobreza, no con la riqueza"

Sánchez sí apuntó a una subida de impuestos medioambiental, porque a su juicio, "la fiscalidad verde está a niveles ínfimos, no está desarrollada".

"Lo que queremos es acabar con la pobreza, no con la riqueza", ha dicho parafraseando a Olof Palme, el ex primer ministro sueco asesinado.

El presidente del Gobierno sí ha prometido disciplina fiscal, ya que sin ella se "derrumbaría" la apuesta económica del Gobierno, y que todas las medidas estarán orientadas a la productividad. 

Contra los muros del independentismo

Sánchez también ha tenido algunas palabras sobre la cohesión territorial, según él vital para que su proyecto tenga éxito. El mensaje, sin citar a Cataluña y el independentismo, tenía un destinatario inequívoco.

"No podemos levantar falsos muros o fronteras en un mundo más globalizado", ha dicho Sánchez. "Compartir soberanía es la única forma de garantizar el progreso y la prosperidad", según él. 

Sánchez ha prometido reformas de calado en los próximos años y ha asegurado que los ejes de acción de su Gobierno redundarán en la productividad, palabra clave de su discurso. El presidente del Gobierno ha puesto el acento en la transición ecológica, el europeísmo y la justicia social. 

En su introducción, el presidente del Círculo de Empresarios agradeció a Sánchez su apuesta por Europa. En cuanto a la situación en España y la gobernabilidad, Bruguera le pidió "perseverar" en la línea del "diálogo, transacción y el acuerdo". 

Los empresarios reconocen las prioridades sociales del PSOE. "Ninguna sociedad digna puede permitirse dejar al margen a una parte de sus ciudadanos", ha dicho Bruguera. Pero el presidente de los empresarios ha pedido a Sánchez impulsar la actividad económica, algo para lo que la política tributaria y de estímulo es fundamental.