Pistoletazo de salida a la precampaña electoral. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha querido ser él mismo quien cuente las bondades del paquete de medidas sobre energía y clima que prepara el ministerio para la Transición Ecológica.

Lo ha hecho en un acto celebrado este miércoles en el citado ministerio en el que, además de la anfitriona Teresa Ribera, estaban presentes la ministra de Industria, Reyes Maroto, de Hacienda, María Jesús Montero, y de Trabajo, Magdalena Valerio, amén de empresarios y actores del sector energético. Un acto que se ha organizado los últimos días para adelantar la presentación del paquete de energía y clima que Ribera llevará al Consejo de Ministros este mismo viernes.

Durante la presentación, Sánchez ha mencionado, en base, algunas de las medidas que el Ejecutivo tiene previsto poner en marcha para el proceso de descarbonización de la economía.

"El plan demuestra que no solo el cambio es posible sino tremendamente necesario", ha explicado Sánchez, que en su intervención no ha querido eludir las críticas sobre el coste que la transición energética generará en puestos de trabajo, sobre todo en cuencas mineras y lugares afectados por el cierre nuclear. En este sentido, el presidente del Gobierno ha asegurado que, durante este proceso, se crearán 300.000 nuevos puestos de trabajo, "fundamentalmente vinculados a servicios, industria y construcción".

Empleos que, en "buena parte", ha dicho Sánchez, vendrán de la mano del despliegue de energías limpias. Según los cálculos del Gobierno, esta transición, que cree "un contrato para el futuro", tiene una cifra clara: 200.000 millones de euros de inversión, pública y privada, bajo modelos mixtos de colaboración.

"Si hacemos bien las cosas, si nos marcamos una senda eficiente, si nos anticipamos, entraremos en un circulo virtuoso de crecimiento sostenible", ha insistido Sánchez.

Hacerlo de forma "solidaria"

Conscientes del coste de algunas de las medidas como el cierre nuclear, sobre todo en territorios ya afectados por la despoblación, el Gobierno presentará también el viernes lo que han acordado llamar la Estrategia de Transición Justa.

Se trata, ha defendido Sánchez, de prevenir los "desajustes" que este proceso va a provocar, especialmente en las comunidades vinculadas a los combustibles fósiles. El Gobierno asegura que pondrá en marcha una "transición justa y ordenada para el sector de la minería y el carbón". "Con discreción cerramos un acuerdo que garantizaran el futuro de los trabajadores de la minería. Esta línea de trabajo es la que vamos a seguir desarrollando", ha insistido.

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