Su historia está relacionada con la navegación y con un navío, el Príncipe de Asturias, que fue botado el 28 de enero de 1794. Más de dos siglos de antigüedad hacen de ella la bandera rojigualda más antigua que se conserva en España y tiene una dimensión de 26 metros cuadrados. Y durante un mes estará expuesta de forma pública en dependencias del Museo Naval.

La exposición de esta bandera forma parte de los actos de conmemoración con motivo de los 175 años de creación de la bandera nacional de España. El lector, sin embargo, habrá advertido que la efeméride no coincide con los más de dos siglos que contemplan a la enseña expuesta en el museo.

¿El motivo? La bandera rojigualda estaba ligada al mundo de la navegación antes de convertirse en bandera nacional. El rey Carlos III estableció en 1785 que esta enseña ondease en los mástiles de sus buques de guerra. Desde entonces, todos y cada uno de los navíos llevaba la bandera indicada por el monarca.

El Príncipe de Asturias no era una excepción. Hablamos de un navío botado en enero de 1794 desde los astilleros ubicados en La Habana. Sus 56 metros de eslora y 15 de manga, sus tres puentes y 112 cañones, hacían del navío un arma de guerra temible que surcaba los océanos. Su nombre evocaba al primogénito de Carlos IV.

La bandera expuesta en el Museo Naval formaba parte de este navío. De ahí sus grandes dimensiones. El Príncipe de Asturias participó en combates singulares: desde Trafalgar hasta la Guerra de la Independencia Española. Hasta que en 1814 se fue a pique. Su bandera, la expuesta en el Museo Naval, fue rescatada y conservada hasta nuestros días. No se conoce otra de mayor antigüedad.

¿Por qué este año, entonces, se conmemoran los 175 años de la creación de la bandera de España? En 1843 -hace 175 años-, Isabel II publicó un Real Decreto en el que dotaba a la bandera nacional los mismos colores que la naval, la rojigualda.

La enseña de 26 metros cuadrados ha sido restaurada por la Real Fábrica de Tapices. Estará expuesta sólo durante un mes, entre el 21 de septiembre y el 21 de octubre, por motivos de conservación.