En el último día de campaña en las primarias del PP, los pesos pesados del partido se movilizan en torno a Pablo Casado. Este jueves, el candidato acudirá a una comida en el restaurante Jai Alai, en Madrid, donde se verá con varios exministros de Rajoy críticos con Soraya Sáenz de Santamaría. 

Así, Casado contará con el apoyo de Rafael Catalá, Juan Ignacio Zoido, José Manuel María Margallo, Isabel García Tejerina, María Dolores de Cospedal y Dolors Montserrat. El que se conocía como el grupo G-8 en la Moncloa, se reunirá con el candidato a la presidencia del PP para prestarle su apoyo y mostrar una imagen de integración del partido.

Esta decisión, según adelanta la Cadena Ser, no ha gustado a Mariano Rajoy que, según fuentes del PP está "muy molesto" por la fractura del partido y por las críticas a su gestión, y habría intentado incluso que esta comida no se realizara, insistiendo en que el expresidente está "haciendo todo lo posible" para que gane Soraya

Sin embargo, en declaraciones a la misma radio, Pablo Casado ha desmentido que Rajoy intentara frenar esta comida, destacando que el expresidente "se comprometió a ser neutral y lo está cumpliendo". "Se ha portado como un caballero", ha dicho.

Sobre el encuentro con los exministros, Casado destacó que "no se trata de una comida contra Soraya" y recuerda que ha "defendido al gobierno de Rajoy durante 7 años y que hay muchos exministros que también se sienten identificados con este proyecto".

Integración

A menos de 48 horas de la votación, el candidato ha lamentado que la campaña de las primarias del PP se haya centrado en "temas irrelevantes, como vídeos de origen desconocido, censos, quién apoya a quién". "España merece más del PP y creo que habría que haber hecho un debate", defendió.

Si gana las elecciones del próximo sábado, Casado asegura que integrará a Soraya Sáenz de Santamaría, "sin ningún problema", pese a haber rechazado la propuesta de ésta para unirse a su proyecto.

La candidatura del diputado del PP quiere crear "un nuevo centro derecha que conecte con la sociedad" y evitar "que Ciudadanos siga creciendo". "Debemos ser transversales, ampliando el espacio electoral desde nuestras raíces para ocupar todo lo que está a la derecha del PSOE".

Sobre la polémica sobre su master, y preguntado por si dimitiría en el caso de ser imputado, Casado no quiso contestar, defendiendo que se trata de "un tema irrelevante y capcioso, que en cuanto pase el Congreso de olvidará".