El director general de Tráfico, Gregorio Serrano, ha culpado este lunes a la concesionaria, Iberpistas, de haber reabierto durante dos horas, desde las 19 a las 21.00 del día 6 de enero, la AP-6, afectada por la nevada, y dejar que circularan los coches, además de no haber activado los protocolos de emergencia.

Serrano, que ha vuelto a pedir disculpas a los ciudadanos por el colapso que provocó la nieve en la AP-6 los días 6 y 7 de enero, ha reconocido que hubo "errores y fallos" en la gestión, ha subrayado que la decisión de la concesionaria no fue acertada y fue una de las causas del colapso de vehículos, muchos de ellos atrapados durante casi 20 horas.

Ha señalado que la predicción meteorológica "desafortunadamente no es una ciencia exacta" pese a los avances tecnológicos y que todavía existe un "margen de incertidumbre en términos de acumulación y de duración" en el caso de las nevadas. Así, recuerda que la gestión y toma de decisiones en este tipo de situaciones es "muy compleja" ya que "requiere la pericia suficiente entre varios actores" para su adecuada resolución. "Resulta sencillo de decir pero no de materializar con inmediatez en la vía", ha declarado en referencia a las medidas tomadas por el DGT durante el temporal.

Serrano también se ha referido a la información que su departamento facilitó a los usuarios de las vías desde el jueves, que fue "de la mejor y extensa manera" que podía el gabinete de comunicación de Tráfico. De hecho, ha señalado que el teléfono de información 011 llegó a recibir 42.000 llamadas durante el fin de semana, mientras que la actividad de Twitter de la DGT "se multiplicó por 50" y la página web "recibió unas 500.000 visitas diarias, cuando en un día normal se registran unas 20.000".

Una gestión "absolutamente incorrecta"

No obstante, el responsable de la Seguridad Vial en España ha vuelto a apuntar a la concesionaria como responsable de la gestión, tal y como ya hiciera en anteriores ocasiones. Así, se ha referido en su intervención a la Ley de construcción, conservación y explotación de autopistas para recordar que, según esta normativa, "la competencia para conservar la vía y para el mantenimiento de la viabilidad de la misma en perfecto estado" es de la concesionaria, en el caso de la AP-6, Iberpistas.

Además, durante el relato cronológico de los hechos ocurridos en la noches del 6 de enero en la AP-6, que ha realizado en el Congreso, Serrano ha enfatizado en que las decisiones fueron tomadas por "la concesionaria", especialmente en los que ha considerado como "los dos fallos mortales de necesidad" que, a su juicio y de su departamento, ocasionaron el caos vivido en esa autopista.

Estos dos errores se produjeron, según ha señalado, a las 19.00 horas, cuando Iberpistas "levantó la restricción" de entrada a la AP-6 de camiones, que se había establecido unas horas antes, "a pesar de la nevada que estaba cayendo"; y a las 21.00 horas cuando se volvió a cerrar la vía pero "no se activó el protocolo de autoprotección" de la carretera hasta dos horas después, impidiendo que ayudas del Estado, de la DGT o la Unidad Militar de Emergencia (UME) no acudieran en ayuda de la concesionaria hasta las 23.00 horas. Así, Serrano resume que la gestión de la concesionaria fue "absolutamente incorrecta y desacertada".

Para destacar la "fallida" labor de Iberpistas en esta materia, el director de la DGT relató también las decisiones tomadas en la A-1, competencia del Gobierno, durante la misma jornada y que, aunque registró retenciones, la gestión fue "fluida y eficaz" y sin registrar "incidencias graves".

Además, ha señalado que, tras abrir expediente informativo por lo sucedido en la noche del 6 al 7 de enero en la AP-6, se han encontrado indicios para abrir un expediente sancionador y penalizador a Iberpistas.

La oposición pide la dimisión de Serrano

Por su parte, la oposición, durante su turno de intervención, ha sugerido a Serrano que dimita de su puesto por las actuaciones de la DGT. A estas recomendación, el director general de Tráfico ha señalado que "si tuviera conciencia de haber hecho algo que mereciera la dimisión, ya lo hubiera hecho".

Tampoco ha considerado la necesidad de cesar a nadie de su equipo. "No voy a cesar al secretario general, que estuvo toda la madrugada en la AP-6, ni al subdirector general de operaciones, que es un excelente profesional que estuvo al pie del cañón, ni al director de gestión de tráfico de Madrid", ni a la subdirectora de circulación, "ni a nadie que se dedicó en 48 horas a hacer lo que se pudo para resolver todos los problemas de una situación compleja" como lo sucedido, ha declarado.

La oposición también ha criticado que haya echado 'balones fuera' en cuanto a su responsabilidad en esta crisis, pero Serrano ha apuntado que, si se le pueda achacar algún error a la DGT es el de "no tener previsto qué pasaría cuando quien tiene la obligación de dirigir y gestionar una autopista de peaje no lo hace de manera correcta".

Aún así, ha insistido en que no está "conforme ni satisfecho" con los sucedido y ha reconocido que "los protocolos no funcionaron como tenían que funcionar".

Antes de cerrar la sesión, el responsable de Seguridad Vial ha dado un consejo a los diputados presentes en la sala: "Jamás escriban nada en las redes sociales cuando estén enfadados, indignados o dolidos. Cuenten hasta 10.000 y después ven cómo va la cosa", ha concluido en referencia a las críticas sobre su tuit en el que ironizaba sobre su presencia en "Sevilla, donde funcionan las líneas telefónicas e Internet" y no en Madrid, durante esta crisis.