Dos concejales de la CUP en Reus (Tarragona), han sido detenidos como investigados por un presunto delito de odio hacia la Policía Nacional. Un juzgado de  la localidad había notificado la orden de detención, anunciada por el propio partido en Twitter, alegando que "obedecer el mandato popular y denunciar la represión no es un delito".

Según había informado previamente la CUP de Reus en su perfil de Twitter les habían "notificado la orden de detención de dos de los concejales de la CUP Reus a raíz de las movilizaciones del 1-O" Aseveraban también que "ante la represión del Estado", seguirían "en pie, alegres y combatientes. Las calles serán siempre nuestras".

Los concejales de la CUP Marta Llorens y Oriol Ciurana no se habían presentado en dos anteriores ocasiones requeridos por el Juzgado de Instrucción 2 de Reus, que investiga la causa.  

La CUP de Reus informó de que esperaban "la detención de Marta Llorens y Oriol Ciurana en cualquier momento", ante lo cual responden: "somos muchas y la solidaridad es la mejor herramienta".

Después del operativo de la Guardia Civil y la Policía Nacional contra el referéndum sobre la independencia del 1 de octubre, los portavoces municipales del PDeCAT-CiU, CUP, ERC y Ara Reus firmaron un manifiesto que sostenía que la convivencia se alteró con la llegada a Reus de la Guardia Civil y la Policía Nacional, que se alojaron en hoteles de la ciudad, y criticaba la intervención policial en la jornada de votaciones.

La causa se abrió tras una denuncia de la Policía Nacional por la polémica generada por la estancia de los agentes en un hotel de la ciudad para participar en el operativo contra el 1-O, y concretamente sobre acontecimientos del martes 3 de octubre, día de paro en Catalunya.

Se convocó delante del Hotel Gaudí de Reus, donde estaban hospedados los agentes, una manifestación contra su estancia en la localidad y, por otra parte, los grupos municipales firmaron el manifiesto que criticaba "la violencia brutal e injustificable" del dispositivo.