Alejandro Requeijo Daniel Montero

Aunque disminuido, aún continúa un despliegue policial extra en Barcelona. En concreto hay dos barcos, el Rapsodi y el Azurra. En el primero siguen cuatro grupos de UIP de la Policía Nacional (unos 200 antidisturbios) y en el segundo hay otros dos grupos de UIP y dos más del GRS de la Guardia Civil. Muchos de ellos vivieron una mala experiencia anoche al comprobar la cena que les tenían preparada para Nochebuena: unas croquetas, espaguetis y un filete con puré de patata.

Según informan fuentes policiales, muchos de ellos se indignaron con lo que entienden una falta de tacto por parte de las autoridades. Varias decenas se fueron del barco renunciando a esa cena y buscaron otro lugar en la ciudad para celebrar la llegada de la Navidad pagándoselo de su bolsillo. 

El menú de la noche del 24 de diciembre.

El menú al que tenido acceso EL ESPAÑOL anunciaba hojaldres mixtos napolitanos, ensalada mixta, galets con sopa de pollo, pasta con marisco, bacalao frito y asado de ternera. La temática navideña quedaba reducida al postre con polvorones y turrón. Sin embargo, el malestar de los policías consultados no es tanto por el menú, sino por el estado de la comida que después les llegó al plato y que han querido dejar constancia a través de fotografías como las que ilustran esta información.

Desde semanas antes de que se celebrase el referéndum ilegal del 1-0, el Ministerio del Interior que dirige Juan Ignacio Zoido desplegó miles de agentes en Cataluña, muchos de ellos en barcos de recreo atracados en el puerto de Barcelona. El despliegue comenzó a reducirse tras la aplicación del artículo 155 por parte del Gobierno, pero aún se mantiene una pequeña dotación, que permanecerá desplegada al menos hasta finales de este mes

Imagen de la ensalada, la pasta y el bacalao frito.