La Gran Vía cambiará para siempre a partir de esta Navidad. El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, ha asegurado que las restricciones al tráfico en la Gran Vía previstas para Navidad se prolongarán más allá de ese periodo, puesto que poco después comenzarán las obras para la ampliación de las aceras de esta emblemática calle.

Así lo ha detallado Calvo en declaraciones a Onda Madrid, recogidas por Europa Press, en referencia a este proyecto y recalcar que el Ayuntamiento quiere una remodelación de Gran Vía para reducir el tráfico. "Los peatones van a ser protagonistas de esta nueva Gran Vía", ha comentado Calvo para indicar que hasta ahora eran los "grandes olvidados". 

Con la remodelación, habrá dos carriles en cada sentido: una para el tráfico de vehículos autorizados y otro para transporte público y bicicletas. 

Según la idea del delegado de Calvo las obras de remodelación justo después de esta festividad, en concreto en un mes.

Una calle "más amable" 

Por ello, Calvo ha dicho que "no tendría mucho sentido" cambiar esos cortes cuando en un breve periodo de tiempo van a comenzar las obras de remodelación de Gran Vía, por lo que se mantendrá la estructura para el momento en que las empresas comiencen estos trabajos.

Al respecto, ha explicado que en Gran Vía transita actualmente 55.000 coches al día y que con esta remodelación, unida al Área de Prioridad Residencial para la zona centro de la capital, la idea es reducirlo a 10.000 vehículos.

También ha dicho que una de las preocupaciones de la alcaldesa, Manuela Carmena, era esta remodelación para hacer de Gran Vía una calle "amable" y "más verde".

En este sentido, el delegado cree que la ciudadanía va a reaccionar "muy positivamente" como ocurrió a su juicio en las navidades pasadas y que la "modernidad va en esa línea", como ocurre con otras grandes ciudades de Europa.