El nuevo PSOE desembarca en los platós. En representación del partido comienzan a verse en televisión nuevas y viejas caras pero, en cualquier caso, diferentes a las promocionadas por la Gestora que dirigió a los socialistas nueve meses, el período entre ambos mandatos de Pedro Sánchez.

La decisión depende de Maritcha Ruiz Mateos, la directora de Comunicación del PSOE, que repite en el cargo y que es una de las personas que más cerca está de Sánchez. Desde su vuelta a Ferraz, el equipo de Ruiz Mateos elabora un plan de comunicación que aún no está cerrado, pero que definirá una estrategia con muchos nombres clave. 

Sánchez quiere mostrar "un nuevo PSOE" que haga olvidar ya no sólo los meses previos a su retorno sino la impopularidad de casi una década en la que el PSOE ha sufrido un histórico declive. 

"Lo que queremos trasladar es que somos un nuevo PSOE y somos la izquierda, como dice nuestro lema", explica una de las personas clave en la nueva imagen del partido y que ya lo ha representado en esta nueva etapa. 

Todos del círculo de confianza

Los nombres incluyen algunos dirigentes jóvenes y otras caras conocidas. Todas ellas están dentro del círculo de confianza de Sánchez, por lo que el relevo en tertulias y entrevistas será muy profundo.

Entre las figuras clave están Cristina Narbona, la presidenta del PSOE, Óscar Puente, el portavoz de la Ejecutiva, Margarita Robles, portavoz del grupo parlamentario, o Carmen Calvo, exministra de Cultura. Pero también hay dirigentes menos conocidos o con menos peso, como Andrés Perelló (del que algunos recuerdan que fue tertuliano de Crónicas Marcianas), Iban García del Blanco, secretario de Cultura, Iratxe García o Ander Gil, ambos promocionados a portavoces en la Eurocámara y el Senado, respectivamente.

Otras figuras de peso, como Adriana Lastra, la vicesecretaria general, o José Luis Ábalos, secretario de Organización, concederán entrevistas, pero evitarán las tertulias o el barro mediático para preservar una imagen que transmita más autoridad. 

"Sí, somos el nuevo PSOE, pero el PSOE de siempre. Durante este tiempo, el partido ha estado aletargado, se le había olvidado la calle, que era de izquierda. La nueva fase se va a notar en la comunicación con gente fresca, solvente, sin complejos ni miedo a acudir a algunos medios que no han sido tradicionalmente nuestras referencias", explican fuentes de Ferraz.

"El otro día los sindicatos decían que se entendían mejor con nosotros cuando estamos en la oposición. Pues bien, vamos a exhibir una comunicación como si no hubiésemos pasado por el Gobierno", aseguran, en referencia al desgaste público sufrido tras la etapa de José Luis Rodríguez Zapatero. 

Odón Elorza, en la tertulia de la SER

El diputado por Guipúzcoa Odón Elorza ha tomado el relevo de Eduardo Madina en la tertulia fija y semanal que modera en la SER Angels Barceló. La tertulia ha sido fuente de gran polémica, pues Madina, que ha participado varios años, ha sido un adversario interno de Sánchez desde hace años. En 2014 al disputarle el liderazgo del PSOE y en 2017 al apoyar con fe ciega a Susana Díaz. "Odón es nuestro hombre en la SER", según fuentes de Ferraz, que no prevén cambios.

Esa tertulia ha adquirido notoriedad por episodios como el de Irene Montero, portavoz parlamentaria de Podemos, que se plantó en la puerta del recinto donde Barceló conducía su programa exigiendo ser invitada en sustitución de Íñigo Errejón con el argumento de feminizar las portavocías. Finalmente, el exgeneral Julio Rodríguez representa a Podemos en ese espacio. 

Carmona, Urquizu, Juan Segovia

Si unos vienen, otros se van. Ignacio Urquizu, al que Sánchez ha retirado de la portavocía que ocupaba en el Congreso, tampoco acudirá a los platós en nombre del PSOE. Tampoco es previsible que lo haga el diputado en la Asamblea de Madrid Juan Segovia, habitual de La Sexta, a pesar de su juventud y tablas, ya que apoyó firmemente a Susana Díaz. Lo mismo le ocurrirá con probabilidad a Isabel Rodríguez, diputada por Ciudad Real. 

Antonio Miguel Carmona, concejal en el Ayuntamiento de Madrid, ha denunciado presiones de Sánchez para que no lo inviten en programas de televisión. Pero Carmona vuela solo y sus dotes comunicativas y para el espectáculo hacen que haya tejido relaciones con directivos de medios de comunicación que probablemente sigan dándole voz aunque no esté en sintonía con la nueva dirección del PSOE.

El premio que es salir en la tele

Fuentes cercanas a Sánchez reconocen que sólo los dirigentes muy próximos a él tendrán voz en la televisión. Puede haber alguna excepción, pero será contada. "Se acabaron las épocas de las Elenas Valenciano y las Sorayas Rodríguez, que llevan décadas saliendo, se les nota que son políticas profesionales y no gustan demasiado a nuestro electorado", explican. 

Con todo, dirigentes que han sido enviados como tertulianos o a entrevistas en televisión reconocen que "salir es una lotería. A veces te llaman y otras no, y ahí hay muchos elementos que tienen importancia: lo que quieren las cadenas, tu cercanía a Pedro y tus propias dotes comunicativas", explican. Es algo que va cambiando. 

El nuevo equipo de Pedro Sánchez tiene especial interés por llevarse bien con los medios y mejorar una relación muy lastrada durante el fin de su primer mandato y las primarias. Ahí será clave La Sexta, donde Sánchez sabe que tiene a parte de su electorado, y donde pugnará por el protagonismo con Podemos. Sánchez ya se ha reunido con algunos responsables de la cadena, como de otros medios que han sido críticos con él, para comenzar el deshielo. Con El País se prevé mucho más difícil. 

Nuevas-viejas caras y el efecto Sanders

Como ocurre con la Ejecutiva, puede llamar la atención que en los platós haya dirigentes históricos como Cristina Narbona o Carmen Calvo, con larga trayectoria política. Pero Sánchez se fía de ellas por su solvencia, porque "desprenden autoridad", según fuentes de Ferraz, y porque "son vistas, pese a su edad y años en el partido, como outsiders. Lo mismo le pasa a Josep Borrell. Sí. No es nuevo, pero cuando habla lo hace con solidez y frescura. Y la gente cree en lo que dice", explica uno de los tertulianos. 

Sánchez quiere buscar el "efecto Bernie Sanders" con esos perfiles más maduros que encajan en su estrategia. Un viejo partido con algunas caras con arrugas, pero que atraen a parte de su electorado y se diferencian de Podemos, algo que encaja en la "oposición de Estado" que reivindican los socialistas. 

Hasta ahora, Perelló es el que más ha salido en la televisión. Tiene 69 años, pero no es muy conocido, a pesar de haber salido en Crónicas Marcianas. "Es alguien muy multidisciplinar. Su cartera en la Ejecutiva [Justicia, Libertades y Nuevos Derechos] es muy amplia. Como eurodiputado que fue, te puede hablar del CETA. Como valenciano, tiene sensibilidad sobre la plurinacionalidad. Y es muy rápido en antena", explican desde Ferraz. 

Ellos convivirán con otras caras más jóvenes, aunque no estrictamente nuevas, que acompañan a Sánchez. Es el caso de Iratxe García, Ander Gil, Iban García del Blanco, Mariluz Martínez Seijo o algunas de las caras más jóvenes a las que la dirección de comunicación irá probando poquito a poco.