Alejandro Requeijo Daniel Montero

El Juzgado de Instrucción número 6 de La Coruña ha archivado la investigación abierta en torno al empresario Francisco Ramón de Lucas, amigo del presidente gallego Alberto Núñez Feijóo. Se investigaba su participación como conseguidor en una trama de fraude en cursos de formación en Galicia y de hacer valer sus influencias en el PP para favorecer a otro empresario, el presunto cabecilla, Gerardo Crespo.

Según el auto al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, la jueza María Jesús García entiende que “no se han puesto de manifiesto datos objetivos” que permitan sostener la acusación de tráfico de influencias que pesaba sobre De Lucas desde 2016. Según la Policía, la trama desarticulada en el año 2014 en el marco de la Operación Zeta desvió para su beneficio parte de los millones que recibió de la Administración para impartir cursos. La UDEF dice en sus conclusiones que se “falseó todo lo necesario” por la "nula actividad controladora” de la Administración.

El resto de la causa sigue adelante y con ella decenas de imputados, entre ellos varios directores generales del gobierno de Feijóo y también del Ejecutivo bipartito socialista. Las pesquisas policiales situaban a Pachi de Lucas como “intermediario para la gestión de reuniones con personajes relevantes del PP”, trabajos por los que Crespo le abonaba “un dinero para gestiones de interés”. El propio Gerardo Crespo, militante del PP, destacó ante la juez en 2015 la amistad entre De Lucas y Feijóo, así como la protección que su socio tenía del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy: “No sólo es amigo de Alberto Núñez Feijóo, es muy, muy amigo y gran protegido de Mariano Rajoy”.

Durante una sesión parlamentaria en octubre de 2014, el BNG a través de su portavoz Francisco Jorquera mostró una fotografía en la que se puede ver a Rajoy junto a Feijóo en una corrida de toros en Pontevedra y, tras ellos, un sonriente De Lucas aplaudiendo. Feijóo siempre ha negado cualquier vinculación con la trama o que el empresario Pachi De Lucas hiciese funciones de conseguidor a instancias suya: “Nunca tuve un mediador, ni lo tendré en toda mi vida; nunca aceptaré que nadie hable en mi nombre”, dijo en el Parlamento gallego.

Cita con Ana Pastor en Génova

Algunas de las gestiones que realizó De Lucas vienen recogidas en el sumario del caso, como la celebración de un encuentro entre la actual presidenta del Congreso de los Diputados, Ana Pastor. A través de un sms, De Lucas le confirmaba en 2011 a Crespo la cita con la dirigente popular: “A las 17.30 horas en Génova, despacho de Ana Pastor”. Sin embargo, la jueza interpreta ahora que “más allá de que existan indicios de que se le encargara la realización de gestiones relativas a los expedientes administrativos que interesaban a Gerardo Crespo, lo que resulta en este momento verdaderamente relevante es que no se ha podido avanzar en la concreción de aquellos indicios en la forma que exige el tipo analizado”.

“No hay datos objetivos que permitan establecer que tales relaciones (entre De Lucas y las autoridades), de existir, fueran de tal naturaleza que el investigado pudiera desde tal posición condicionar el sentido de sus resoluciones”, añade la magistrada en su auto firmado este jueves. Contra esta decisión cabe recurso de apelación ante la Audiencia Provincial.  

La relación entre Crespo y De Lucas se rompió, según el primero, cuando empezó la investigación sobre sus empresas, momento en el que el presunto conseguidor dejó de contestar a sus llamadas. El supuesto cabecilla de la trama también recurrió por su cuenta a Feijóo a través de varios correos electrónicos enviados en octubre y noviembre de 2011, en los que le pedía ayuda ante su “preocupación” por quedar fuera  de concursos.

“De acuerdo con la última conversación que mantuvimos, utilizo este medio para manifestar mi preocupación por las informaciones que me transmiten desde Traballo con respecto a los proyectos que han presentado las organizaciones que dirijo”, decía en el primero de sus correos titulado “Estimado presidente”