“Hemos subido el Himalaya. Hemos coronado un ocho mil”. Con esas palabras resumió Pedro J. Ramírez en Badajoz el incremento del 448,9% de usuarios únicos de EL ESPAÑOL desde sus inicios en octubre de 2015 hasta el pasado enero.
El total de lectores al mes rozó en este inicio de 2017 los trece millones y medio, cifra que coloca al periódico digital entre los más influyentes del país. “En tan solo un año, EL ESPAÑOL se ha convertido en uno de los cinco grandes periódicos de España”, afirmó en su intervención el director y presidente del diario.
Pedro J. Ramírez dio inicio en Badajoz a la gira de Encuentros de EL ESPAÑOL, que le llevará por diez ciudades españolas. En el auditorio de la Torre Siglo XXI explicó ante la audiencia que se trata de “una gira para promocionar la libertad” en la que inserta el proyecto del periódico dentro de un objetivo mucho más ambicioso: utilizar medios de comunicación independientes del poder como instrumento de la regeneración democrática.
Recordando su salida de El Mundo, “por revelar los SMS entre el presidente del Gobierno y el tesorero de su partido”, Pedro J. Ramírez alertó de la falta de libertad de prensa en España y reflexionó sobre la incertidumbre del mundo actual, que se creía superada tras la caída del Muro de Berlín. “Y de repente volvemos a sentir otra vez que nos encontramos al borde de precipicios oscuros ante los que es más importante que nunca que la sociedad esté bien informada y tenga elementos de juicio para tomar sus propias decisiones como ciudadanía, como votantes, como clientes y como usuarios de servicios”.
Pedro J. Ramírez en un momento de su conferencia en Badajoz.
Los medios digitales serán la clave para crear un nuevo 'statu quo' que sustituya al erosionado modelo tradicional de los medios de comunicación, al servicio de la “amalgama de poder” de políticos y empresarios. En este nuevo orden de cosas, del que EL ESPAÑOL es la avanzadilla, es necesario recuperar el equilibrio entre los ingresos generados por los anunciantes y los provenientes de los lectores para garantizar la independencia de los medios. “No hay vuelta atrás al papel”, explicó.
Su proyecto de mayor éxito
Pedro J. Ramírez pronosticó un crecimiento sostenido para el periódico y consideró que su tercer proyecto periodístico tras Diario 16 y El Mundo va camino de convertirse en “el que tenga más éxito, más influencia y más peso en la sociedad española”.
Sus proyectos de futuro pasan por la internacionalización, con la posibilidad de un “incremento exponencial” de los lectores al ampliar el marco a todo el mundo hispanohablante. Su ambición explícita es que EL ESPAÑOL sea “relativamente pronto” el periódico más leído en lengua española y una herramienta para apelar a la racionalidad y la lógica, en lugar de a “los tópicos y clichés fáciles del populismo”.
“El eje del posicionamiento de EL ESPAÑOL, que nace en 2015 en medio de un proceso de merma de la libertad de expresión, es nuestro patriotismo constitucional”, afirmó. Su meta es recuperar el ideal de lealtad que representan la Constitución de Cádiz (1812) y el Trienio Liberal (1820-1823), dos hitos en los que, apuntó, participaron políticos e ilustrados extremeños como José María Calatrava o Fernández Golfín.
Parte del público que asistió a la conferencia de Pedro J. Ramírez.
Ese modelo democrático surgido del liberalismo de los albores del siglo XIX se tambalea hoy cuando se ponen en cuestión la soberanía nacional —que “no es troceable”— y la solidaridad entre territorios. “¿Qué es eso de los territorios históricos? ¿No hemos tenido historia los demás? ¿No hemos estado orgullosos de nuestros ancestros?”, se preguntó el director y presidente de EL ESPAÑOL durante su primera parada de esta gira.
"Cada uno de nosotros tiene la obligación de intentar que las nuevas generaciones reciban un mundo mejor. El periodismo tiene esa cosa. No es un oficio, no es una profesión. Es una manera de vivir, una de las maneras más dignas de vivir”, concluyó Ramírez.