Pasados cincuenta días de la desaparición, Diana López-Pinel mantiene la esperanza de que su hija aparezca con vida. Los avances en las pesquisas de la Guardia Civil no son concluyentes, y aunque el radio de búsqueda se ha reducido en un radio de 7 kilómetros en Taragoña (Rianxo, Coruña) no hay pruebas suficientes para descartar ninguna hipótesis. Para su madre, Diana Quer fue víctima de una "desaparición forzosa".

"El sentimiento de creer que volverá, que yo también lo comparto, es lo que le da fuerzas para seguir adelante en un momento tan complicado", explica a EL ESPAÑOL Pedro Víctor de Bernardo, el abogado de Diana López-Pinel. Según indica, la madre de Diana Quer confía en un desenlace positivo a una pesadilla que se viene prolongando desde el 22 de agosto, madrugada en la que desapareció la joven.

"Desde luego, no creemos en la posibilidad de una marcha voluntaria", afirma el letrado De Bernardo. El abogado cree que habría pasado demasiado tiempo sin que Diana Quer diese una señal sobre su paradero. "Ha tenido que ser una marcha forzosa", advierte el abogado.

Entre la fuga y el secuestro

La hipótesis de una fuga por iniciativa propia fue una de las primeras posibilidades que barajó la Guardia Civil. No sería la primera noche en la que Diana Quer se hubiera marchado de casa, contactando con sus padres a la mañana siguiente para decirles dónde se encontraba.

Sin embargo, los agentes encontraron en la vivienda de A Pobra do Caramiñal el DNI y las tarjetas de Diana Quer. La joven, además, no llevaba más que lo puesto, sin más ropa o dinero que el que llevaba aquella noche. La hipótesis de una marcha voluntaria, por tanto, se debilitó.

A estas pistas hay que sumar, además, las sensaciones de sus padres, que nunca han creído que su hija pudiera haberse marchado durante tanto tiempo haciéndoles pasar por el trance que les ha tocado vivir.

Frente a la posibilidad de una fuga, los agentes barajaron un hipotético secuestro. Juan Carlos Quer, padre de Diana Quer, afirmó pasada una semana de la desaparición que no creían en un secuestro con fines económicos, puesto que nadie les había llamado para pedir ningún rescate.

Pero Diana López-Pinel se aferra a la posibilidad de una "marcha forzosa"; sensación que, de acuerdo a su abogado, es "la que le mantiene con fuerzas" para seguir adelante en este proceso.

Las incógnitas de la investigación sobrevuelan ahora Taragoña, a 20 kilómetros de A Pobra do Caramiñal en coche. Las antenas de telefonía móvil captaron que Diana Quer pasó al menos una hora -entre las tres y las cuatro de la madrugada- en algún lugar de este escenario. La Guardia Civil centra sus pesquisas en un radio de unos 7 kilómetros.

El fin del secreto de sumario

El secreto de sumario sobre la desaparición de Diana Quer se prolongó, inicialmente, un mes. Cumplido el plazo, la titular del Juzgado número 1 de Ribeira decidió extender el secreto otro mes más.

Por entonces, el abogado Pedro Víctor de Bernardo calificó como "buena" la noticia. Según explica ahora, "es gracias a eso que no se ha entorpecido la investigación de la Guardia Civil": "Así se han producido avances", explica.

La semana próxima concluirá la prórroga del secreto de sumario. En caso de prolongarse una vez más, el Instituto Armado podrá seguir con las pesquisas sin mayores injerencias; si se levanta será, a todas luces, porque se decida citar a alguien en calidad de investigado, figura que anteriormente se conocía con el nombre de imputado.