“En Zarzuela ya no hay zonas oscuras” fue el lema con el que Felipe VI accedió al trono el 19 de junio de 2014. Este viernes, la Casa del Rey ha dado un paso más en el camino de la transparencia para equiparar a la Corona española con el resto de las monarquías occidentales.

A partir de ahora, se endurecen las normas de los contratos suscritos: la Casa del Rey cuenta con 21 páginas redactadas bajo los principios de “concurrencia, transparencia, eficiencia, agilidad, simplicidad y coordinación” ordenados por el Real Decreto 772/2015, de 28 de agosto. Así, de la misma manera que Juan Carlos I entregó a los españoles el poder absoluto que Franco le entregó en mano, Felipe VI renuncia a llevar los asuntos de la Casa con la libertad de la que gozaba su padre.

Apuesta por la transparencia

Al mismo tiempo, y por primera vez, la Casa del Rey ha hecho pública este viernes la relación completa de los 58 contratos y dos convenios suscritos a lo largo de 2015 por un total de 2 millones de euros. La anterior, en diciembre de 2014, correspondía sólo a la mitad. Así, en la lista de este viernes se detalla el año entero con el precio y el nombre de la empresa contratante. Vemos, por ejemplo, que los reyes adquirieron un coche eléctrico (20.358 euros) a Comarth Engineering SL y que se interesan mucho por el análisis de la información en internet: han prorrogado hasta el año que viene el servicio a Intelecta Ideas por 95.832 euros.

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La Casa del Rey no podrá contratar con personas que hayan sido condenadas por corrupción o cohecho, o que hayan sido sancionadas por infracción en materia de igualdad de oportunidades. Tanto las instrucciones como la relación de contratos están colgados en la web de la Casa Real.

Vendrán más pasos. Faltan la relación desglosada de los presupuestos y la de los regalos institucionales, que está siendo tabulada en estos momentos. La lista completa de regalos recibidos por los reyes a lo largo de 2015 también será colgada en la web de la Casa con una descripción del artículo y su procedencia. Lo que aún no sucede en España, como por ejemplo sí ocurre en Buckingham Palace, es que los ciudadanos tengan acceso al listado pormenorizado de todos los gastos en los que incurre la Corona, desde jardinería hasta alimentos.

Uniformes y ágapes

En esta relación de contratos vemos que se dedicaron 20.838 euros a los uniformes de los conductores y 14.766 euros en La Casa de las Batas para el servicio doméstico. También, que el catering de las dos grandes recepciones del año (Palma de Mallorca y Fiesta Nacional) no llega a los 60.000 euros.

Nada más comenzar el reinado, en el verano de 2014, Felipe VI ya reguló el nuevo funcionamiento de su familia y de su casa. Ningún miembro de la Familia Real (reyes eméritos, reyes, princesa de Asturias e infanta Sofía) puede desarrollar actividades fuera de las institucionales. También decidió el nuevo Rey que la Casa se apoyara en la Intervención General del Estado, la Abogacía del Estado y la secretaría de Estado de Comercio a través de convenios.

Bajo Juan Carlos I, los asuntos legales personales y de la Casa se confundían, pues había un solo asesor para todo: José Manuel Romero Moreno, conde de Fontao. Ahora hay una estricta separación entre los asuntos personales de los miembros de la Familia Real y los relacionados con la Jefatura del Estado, según fuentes de la Casa.

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