El Real Madrid visitaba Balaídos en la duodécima jornada de Liga en una cita complicada para los chicos de Santiago Solari. En el minuto siete de partido, Maxi Gómez, el delantero uruguayo del Celta de Vigo, se lanzó por el suelo para intentar cortar un balón, barriendo a Casemiro y provocando que este se torciera el tobillo derecho en una dura acción, una acción que ha levantado mucho revuelo por el juego agresivo que han mostrado los jugadores locales.

Cristóbal Soria llegaba a El Chiringuito con la clara misión de defender lo indefendible. Con un discurso que no lograba convencer ni a él mismo, ya que las faltas que ha recibido el Real Madrid estaban al borde del reglamento. "Es una broma decir que el Celta ha sido violento. ¡Yo quiero jugadores así!", gritaba el tertuliano ante la gran sorpresa que creaba en sus compañeros. "Catalogar el juego del Celta como violento me parece excesivo", defendía el tertuliano la falta con la que el jugador brasileño caía lesionado. 

El brasileño pidió la entrada de las asistencias para que lo atendiesen y por tanto tuvo que retirarse del terreno de juego antes de que se reanudase el partido. Una vez fuera trataron de enfriar su tobillo, volviendo al césped apenas un minuto después, pero lamentablemente no pudo continuar jugando. El '14' no fue el único que sufrió una entrada desmedida, ya que el galés Gareth Bale jugó media parte con el tobillo hinchado tras un golpe con un defensor.

Casemiro, lesionado contra el Celta. Foto: Twitter (@elchiringuitotv)

Solari ha visto juego duro

Nada más y nada menos que el entrenador del Real Madrid no ha tenido dudas en afirmar que el cuadro celeste se ha empleado con dureza, a veces en demasía para parar a los jugadores blancos. Y jugadores como Casemiro, Bale o el propio Odriozola se han visto perjudicados por ese estilo de juego. 

[Más información: Casemiro, lesionado en Balaídos en el Celta - Real Madrid]

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