El excentrocampista del AS Monaco se convirtió en la gran atracción de los últimos meses en el fútbol europeo y ahora tendrá que demostrarlo en el Real Madrid. Aurélien Tchoaméni vivió su explosión este año con una gran temporada sorprendiendo por su desempeño como jugador y también por su capacidad para liderar el grupo. Pero desde FranciaJames Bunce, director de rendimiento del club monegasco, explica cómo el factor físico lo cambió todo.

Ya queda menos para verle en Valdebebas. Tchouaméni disfruta de sus vacaciones en Estados Unidos y buena parte del tiempo se lo está dedicando a su preparación física. Carlo Ancelotti y Antonio Pintus le podrán sacar partido en su primer año porque se avecina una temporada agotadora en cuanto a calendario. Los internacionales podrían disputar hasta 70 partidos al celebrarse el Mundial a mitad de temporada. Por ello, el francés es fundamental para repetir los éxitos cosechados.

"Si tomamos el ejemplo de Tchouaméni: cuando comenzamos a hacer más, comenzó a hacer más preguntas", explica Bunce sobre la implicación del centrocampista en su mejora en este aspecto. "Si el Real Madrid ha gastado mucho dinero es porque confían, y nosotros también, en que Aurélien puede desarrollar un nivel físico desde el primer momento", apunta el director de rendimiento del AS Monaco que conoce mejor que nadie al nuevo hombre de la medular merengue.

Tchouameni, presentado con el Real Madrid Real Madrid

Solo tiene 22 años, pero ya muestra una enorme madurez y se comporta en el césped como un auténtico mariscal. Rasgos que le ayudan a tener un protagonismo total en el juego, ya que es el ancla tanto ofensivo como defensivo de su equipo. Eso es lo que precisamente ha enamorado a todos los grandes de Europa, en especial al Real Madrid. Tchouameni es uno de esos mediocentros considerados como los centrocampistas del futuro.

En lo que sería el Real Madrid del futuro, muchos se imaginan ya al francés con su compatriota Camavinga y Fede Valverde de interiores. Un mediocentro imposible de ganar en lo físico y al que nadie podría tumbar corriendo y sumando kilómetros. Pero incluso también junto a jugadores de otro corte más técnico y refinado como puede ser Dani Ceballos, si finalmente el utrerano se queda en el Real Madrid. Pero también es presente.

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En el Real Madrid pasará a ser el sustituto ideal de Casemiro, capaz de jugar solo en la medular con Toni Kroos y Luka Modric por delante. Esta temporada ganará en importancia en este puesto, aunque también puede ocupar cualquiera de los otros dos. Puede formar pareja en el doble pivote, preferiblemente con un jugador más estático y de un corte más constructor de juego como podría ser el alemán. Hay muchas posibilidades para el francés sobre el campo. 

Es un futbolista que va intenso al corte y a los choques y que es muy hábil en la recuperación de balones, especialmente cuando se lanza al suelo. Tiene una facilidad pocas veces vista para ir limpio y contundente y hacerse con el esférico. Quizás en esa faceta sea incluso mejor que el propio Casemiro, aunque no goce de su fuerza en los contactos.