Sigue el torrente de informaciones que relacionan a Zinedine Zidane con el PSG. Ahora se pone el foco en el verano de 2022, cuando el técnico francés podría llegar al club parisino como sustituto de Mauricio Pochettino. Se confirma que ha habido contactos en las últimas semanas y una reunión que le acerca al Parque de los Príncipes.

Zidane, contra todo pronóstico, parece que se acerca al PSG pese a que muchos lo verían como una traición tanto al Olympique de Marsella, club que lleva en su corazón y eterno rival del equipo de París, y al Real Madrid, por la guerra abierta que hay con Al-Khelaifi y Leonardo por Mbappé y la Superliga.

Le Parisien ha informado este jueves de los pasos que se están dando para que Zidane dirija al PSG más pronto que tarde. El diario francés, muy próximo al club de la capital, insiste en las conversaciones que se han producido recientemente y, además, revela la celebración de una reunión en el Royal Monceau, hotel de lujo de París, a la que habrían asistido Leonardo y Jean-Claude Blanc, director general del PSG.

La hoja de ruta deseada por el PSG es que Zidane se convierta en el séptimo entrenador desde la entrada de Catar en el club. El entrenador de las tres Champions League consecutivas del Real Madrid sería el sucesor de Pochettino, quien llegó al cargo hace menos de un año. Respecto al argentino, crecen las dudas sobre su posible despido antes de que acabe la temporada y ni siquiera él mismo puede confirmar su futuro.

Mauricio Pochettino, con el PSG Reuters

Las negociaciones avanzan entre Zidane y el PSG y, en este punto, no se puede descartar que el técnico francés acabe dirigiendo a Messi, Neymar y cía en un futuro próximo. Más dudas hay de que pueda hacerlo con Mbappé, siendo quizás su única opción coger el cargo inmediatamente. A final de temporada, el delantero acabará contrato y su intención de firmar por el Real Madrid no ha cambiado ni lo hará por la hipotética llegada de Zidane al banquillo.

Pochettino y el United

Pochettino está entre la espada y la pared. Su cargo como entrenador tiene fecha de caducidad, que apunta a ser el final de temporada, y eso significaría que tendría que dejar pasar el tren de un Manchester United que ha llamado a su puerta y antes lo hizo con el propio Zidane, que respondió con un 'no'.

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