Este miércoles 14 de febrero se disputará la ida de los octavos de la Champions League entre el Real Madrid y el PSG. Un partido que acapara toda la atención mundial, y que hay un jugador blanco que lo afronta con muchas ganas: Gareth Bale.

SUCESOR DE CRISTIANO RONALDO

El galés llegó en el verano de 2013 con un objetivo claro: ser el sucesor de Cristiano Ronaldo. Sin embargo, las lesiones impidieron al galés llegar a ese nivel, siendo la victoria por 1-0 ante el Manchester City en las semifinales de la competición europea de la temporada 2015/2016 la última noche grande que se le recuerda.

NEYMAR

Paralelamente, también en el verano de 2013, Neymar fichó por el Barcelona tras muchas idas y venidas. El que iba a ser el heredero de Messi a día de hoy juega en el conjunto francés. Sus coqueteos con el club merengue, por otro lado, han sido constantes, y muchos afirman que este será definitivamente el verano en el que se vea a Neymar vistiendo de blanco.

LIDERAR AL EQUIPO

La llegada del extremo brasileño sería un punto de inflexión para el galés, pues se vería relegado a un segundo plano o a salir del equipo. Es por ello que Bale quiere ser el líder del Madrid ante el PSG, ganándose así a la afición, la directiva y el cuerpo técnico. Un voto de confianza que terminaría por consagrarle tras varias temporadas a un nivel irregular.

FORMA FÍSICA

Es el mejor momento. Tras salir de su última lesión, el exjugador del Tottenham Hotspur le ha hecho frente a todo. Molestias, pitos, falta de gol... Nada ha podido con un Bale que, gracias a las precauciones de Zinedine Zidane, entrenador del club, llega como un tiro a la eliminatoria.

El duro entrenamiento diario de Gareth Bale by footbie.com