Microsoft y el Real Madrid trabajan para sacar el máximo rendimiento de la plantilla blanca. A través de un GPS, se analiza el esfuerzo y trabajo de los blancos en cada sesión de entrenamiento y además se utiliza para prevenir posibles lesiones.

Javi Mallo, preparador físico del club, ha asegurado que dicho aparato además controla la potencia, esfuerzo, frecuencia cardiaca, aceleraciones, velocidad y trabajo realizado y se vuelva de forma instantánea, lo que permite que cada jugador pueda recibir instrucciones individualmente.