Zidane tendrá que tapar dos huecos de suma importancia en el centro del campo este domingo en Balaídos. La baja por suspensión de Kroos y la más que probable ausencia de Modric en el once dejan en cueros la medular del Real Madrid que tendrá que reponerse de nombres no tan habituales. Con el pivote cubierto por el omnipresente Casemiro, las dos posiciones por delante suya requieren nuevos inquilinos.

Kovacic parece un fijo de cara al encuentro. El joven croata pasa por su mejor momento de forma y lleva varios partidos seguidos siendo de lo más destacado del Madrid. El fin de semana pasado vio puerta ante la Real Sociedad redondeando una actuación casi perfecta. Ante la ausencia de su compatriota de inicio, Mateo tendrá una nueva oportunidad para sobresalir ante el Celta.

Con la plaza de Modric cubierta, el puesto de Kroos plantea más dudas para Zidane. La opción que más se acerca a los planes del técnico francés sería colocar a Isco como hombre más adelantado en el centro del campo blanco. El malagueño es un jugador importante para el galo y no tendría problema alguno para confiarle la titularidad.

Otro que podría completar la medular merengue podría ser Asensio, pese a que es más habitual verle en el tridente de ataque que en una posición tan retrasada. La última opción -y la más arriesgada- pasaría por hacer un cambio en el esquema y optar por el 4-2-4. Una alternativa muy ofensiva que podría posicionar al propio Asensio junto a Lucas, Cristiano y Benzema. También Morata tendría cabida en este dibujo.

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