El fichaje de Thomas Heurtel por el Real Madrid tuvo de todo. Desde la tensión por venir del Barça hasta la polémica por el abandono del cuadro culé en Estambul. Sin embargo, parecía que vestir de blanco le daría la estabilidad y comodidad necesarias para mostrar su mejor versión. Menos de un año después, el francés ha sido apartado del equipo por indisciplina y queda claramente señalado tras su último paso por España.

El base galo siempre ha estado en el centro de todos los focos por su liderazgo. Pero, a la vez, por una irregularidad que muchas veces se vinculó a la falta de trabajo. El talento lo tenía. Y es evidente. También el cariño de gran parte de la afición, que siempre mantuvo en mente sus mejores versiones en Baskonia o Anadolu Efes. Pero ambas imágenes se han esfumado en la capital y en Barcelona por las formas de su adiós. 

Además de complicada salida que ha tenido tanto en Barça como en Madrid, el final de Heurtel en ambos conjuntos coincide en un punto: su tensa relación con los entrenadores. En el caso del Barça, nunca terminó de entenderse con un Pesic cuyo carácter le llevó a pelearse en el banquillo sin importar las cámaras. Tampoco con Jasikevicius tuvo feeling y de ahí que buscara salida en plena temporada.

Heurtel atacando ante Maccabi EFE

Y con Pablo Laso, pese a que el vitoriano dio el visto bueno a su llegada, ha terminado su relación con la sensación de no haber cumplido con la confianza puesta en él tanto dentro como fuera de la pista. El técnico del Real Madrid siempre ha sabido cómo gestionar el vestuario y en el caso de Heurtel se ha vivido la excepción que rompe la regla en todo principio. 

Fiesta en el Madrid

La llegada de Heurtel a la capital se celebró notablemente por los aficionados. El equipo cogía a un base de primer nivel y que, además, ya había mostrado su simpatía por el club anteriormente. No hay que olvidar que antes de su fichaje por el FC Barcelona Heurtel compartía en sus redes sociales una fotografía luciendo el escudo merengue. Su enemistad con la entidad catalana y ese cariño al conjunto blanco generaron la atmósfera perfecta para festejar su incorporación.

Heurtel no ha terminado de estallar en el Real Madrid tras sus inicios con Pablo Laso. Sí que ha dejado buenas actuaciones. De hecho, su media de puntos en Euroliga es de nueve puntos y casi 10 de valoración. En ACB, 8,6 puntos por partido y 9,4 créditos de valoración media. Sin exhibiciones, pero con un buen nivel a la vista de la complicada temporada que está viviendo el equipo.

Muchos hablaron de una mala relación con Laso en su llegada. Esa duda quedó despejada con la confianza que le brindó el técnico. Pero su situación cambió con el duelo ante Panathinaikos en Atenas. El base, junto a Thompkins y presumiblemente con Yabusele, salió de fiesta hasta bien entrada la madrugada. Justo el día antes del partido. Y en un momento de debilidad del equipo por los resultados.

La falta de disciplina tuvo consecuencias. El martes Laso tenía claro que los dos jugadores iban a ser apartados. El viernes ante el Bayern no tuvieron minutos. Y en la previa de El Clásico, ante la incógnita de la prensa, Laso confirmó la noticia: por decisión técnica no volverían a jugar en el Real Madrid.

Abandono en el Barça

El fichaje por el Real Madrid fue, según deslizaron desde el FC Barcelona, la razón de su abandono en Estambul. Sin embargo, cabe recordar que los problemas de Heurtel en el conjunto azulgrana comenzaron algo antes. Concretamente con Pesic como entrenador. El veterano técnico tenía carácter de sobra. Y puede que Heurtel nunca entendiera cómo gestionarlo. La tensión llegó a tal punto que ambos se enfrentaron en el banquillo en pleno encuentro con algo más que una mirada.

La difícil relación entre ambos quedó en evidencia. Pero el juego del equipo dependía mucho del francés. El nivel de la pugna entre base y entrenador fue tal que antes de su marcha todo el mundo lo tenía claro: o continuaba Pesic o lo hacía Heurtel. En 2020 llegó Jasikevicius y el club pasó de página. Lo hizo con Heurtel en la plantilla. Pese a ello, lo peor estaba por llegar.

El técnico lituano, también con carácter, puso por delante a Calathes. Heurtel quedó relegado a un segundo plano y a mitad de temporada comenzaron los rumores sobre su marcha. El francés no quería seguir y miró opciones. El Real Madrid se fijó en él, Heurtel viajó con el equipo a Estambul para la jornada de Euroliga y, a la vuelta, el conjunto catalán le dejó en el aeropuerto completamente solo.

Oriola y Heurtel durante un partido del FC Barcelona ACB MEDIA

La razón que dieron desde la entidad es que estaba negociando a espaldas del Barça con el Real Madrid. Que viajar a Estambul para un posible fichaje por el Fenerbahçe era una farsa para no desvelar el acuerdo con la entidad merengue. El Barça no le dejó subirse al avión con el resto de compañeros y los sindicatos se echaron encima de la entidad. La justificación que se dio es que le habían asegurado billete y hotel gratis y de calidad al día siguiente. Sin embargo, se conoció que habían ido excompañeros de Heurtel a buscarle al aeropuerto.

Thomas puso fin a su etapa en el Barça. Lo hizo sabiendo que no podía fichar por el Real Madrid hasta acabar su contrato. Se marchó al ASVEL y luego confirmó su vinculación con el club merengue. Era un contrato de 1+1 opcional para ambos. Pero ese primer 'uno' ni ha llegado a cumplirse tras su falta disciplinaria grave. 

[Más información - La gran depresión del Real Madrid de Baloncesto: del futuro de Laso a la fiesta de Heurtel y Thompkins]

Noticias relacionadas