El Real Madrid logró una victoria histórica para lograr el 2-0 en la eliminatoria y dejar al Barcelona totalmente hundido. Los árbitros tuvieron un gran protagonismo en el choque, y no precisamente por su buena actuación. El juego del conjunto culé, que por momentos rozó lo antirreglamentario, no fue castigado en ningún momento. Además el base francés Thomas Heurtel tuvo su noche y fue el gran artífice de la ventaja de su equipo con 30 puntos. Pero fue Carroll y un triple en el último segundo el que le dio la victoria al Real Madrid. Una remontada increíble. [Narración y estadísticas: Real Madrid 81-80 Barcelona Lassa]

El partido comenzó con una defensa férrea por parte del Real Madrid, que evitó que el equipo culé lanzara a canasta en los dos primeros ataques. Pese a ese gran inicio en defensa, en la parte ofensiva no anotaron con facilidad hasta que llegó la clase de Rudy Fernández (4-4, minuto 4). El choque se empezó a calentar por momentos, y primero Campazzo y luego Ribas acabaron por los suelos. 

El alero merengue y Pesic tuvieron más que palabras en uno de los primeros piques del encuentro, pero los colegiados calmaron la situación avisando con una posible técnica. El Barcelona aprovechó ese momento de tensión para marcharse ligeramente en el marcador (7-13, minuto 8). A pesar de los cambios, el conjunto local no encontró su ritmo, que se vio muy perjudicado por el trío arbitral. 

El segundo acto continuó con la misma dinámica y con fallos inusuales en la plantilla blanca, que no pudo bajar la diferencia en los primeros compases del cuarto (15-23, minuto 13). Los árbitros siguieron señalando acciones muy polémicas y todas a favor del Barcelona. Una antideportiva de Oriola provocó la reacción blanca, pero una nueva situación polémica frenó ese nuevo arreón. 

Ayón se echó el equipo a la espalda, pero los triples no estuvieron del lado local, con un 0% (21-27, minuto 16). Carroll rompió la sequía desde el 6'75, y poco después Causeur colocó a su equipo a un solo punto. El escolta americano continuó con el parcial (10-0) y provocó el tiempo muerto de Pesic, que vio como su equipo sobrevivió gracias al rebote ofensivo. Finalmente un triple de Claver dio la ventaja a los visitantes antes del descanso (29-34, minuto 20).

Los árbitros perjudicaron al Madrid

Tras el paso por vestuarios, la dinámica no cambió y siguió imperando la baja anotación y los fallos en el lanzamiento. Tavares rompió la sequía anotadora con un mate que consiguió incendiar a la grada, más pendiente de la actuación arbitral. Según pasó el tiempo, el trío encargado de dirigir el choque se hizo con el protagonismo absoluto. 

Heurtel se colocó como hombre del encuentro con 22 puntos y varios movimientos increíbles para zafarse de sus defensores. Pablo Laso tiró de galones y volvió a colocar a Carroll en pista para lograr una remontada (41-51, minuto 27). Tres triples consecutivos del Real Madrid recuperaron la ilusión por entrar en el último cuarto con opciones serias de pelear el partido. 

Carroll desató la locura final

El último acto comenzó con un parcial de 4-0 que situó al Real Madrid a solo un punto de diferencia (57-59, minuto 31). Un triple del escolta americano devolvió el empate a un marcador que provocó el delirio absoluto en la grada local, aunque una pérdida de Ayón en el peor momento volvió a poner las cosas muy difíciles para el conjunto merengue. 

Los fallos siguieron siendo un puñal para el Real Madrid, además Pangos pareció finiquitar el choque con un triple tras una mala defensa. Pero llegó el gran final y ahí apareció Carroll. El escolta americano anotó un triple prodigioso tras un rebote de Rudy Fernández, para acabar con 25 puntos y 28 de valoración. Un triple sobre la bocina que vale por un 2-0 y por media final, que se puede decidir en la Ciudad Condal.

Real Madrid 81-80 Barcelona

Real Madrid: Randolph (6), Rudy (7), Campazzo (4), Tavares (11) y Deck (1) -equipo inicial-, Causeur (2), Ayón (8), Llull (13), Carroll (25), Taylor, Reyes (1) y Thompkins (3).

Barcelona Lassa: Pangos (9), Ribas (2), Singleton (4), Claver (12) y Tomic (6) -equipo inicial-, Hanga, Heurtel (30), Oriola (12), Smits (5) y Kuric.

Árbitros: José A. Martín, Antonio Conde y Rafael Serrano. Facundo Campazzo (m.38), Pierre Oriola (m.40) y Randolph (m.40) fueron eliminados por cinco personales.

Parciales: 11-17 | 18-17 | 24-25 | 28-21

Incidencias: Segundo partido de la final de la Liga Endesa disputado en el Palacio de Deportes (WiZink Center) de Madrid ante 12.247 espectadores.