Luka Doncic sigue haciendo magia. El joven base esloveno es la gran promesa del baloncesto internacional, y su partido ante el Movistar Estudiantes vuelve a ser una buena prueba de ello. Doncic recibió el balón en su campo, comenzó a sortear rivales y, tras llegar a la canasta contraria, anotó mediante una gran bandeja con la mano izquierda. Tal jugada puso en pie al WiZink Center, que aplaudió y vitoreó la calidad de su jugador. De esta forma, en el derbi madrileño, la estrella del Real Madrid volvió a dejar patente porqué posee tal estatus.

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