11 de septiembre. 16:15 horas. El Real Madrid tiene marcadas en rojo esa fecha y esa hora ya que será el momento en el que balón vuelva a rodar en el Santiago Bernabéu. Atrás quedarán 559 días de vacío total en los que la pandemia 'sacó' al público de las gradas y el equipo blanco se mudó a Valdebebas para aligerar las obras del coliseo blanco.

Quedan menos de 20 días para el momento tan esperado. El fútbol se volverá a colar entre las obras, que no pararán durante la temporada, pero sí se amoldarán al calendario para permitir que el aficionado madridista presencie los partidos y el club pueda hacer caja con las entradas. Será un alivio para las cuentas y no tiene por qué ser un freno para los trabajos de remodelación del estadio.

Eso sí, el trabajo será intenso de aquí al 11 de septiembre. El que eche un vistazo al estado actual del Bernabéu podrá apreciar que la práctica del fútbol sigue siendo imposible, pero todo se centrará en adecuar el coliseo merengue para volver a abrir las puertas en la cuarta jornada del campeonato de Liga.

¿Qué queda para dejar listo el Santiago Bernabéu? El Madrid fue previsor y, como ya hicieron otros clubes en el pasado con su estadio en obras, pidió jugar las tres primeras jornadas como visitante. Eso dio un margen para avanzar en los trabajos y asegurarse de que también sea seguro volver a recibir público en el estadio.

Un césped provisional

Lo principal es el césped. El verde todavía no luce en el centro del estadio, pero lo empezará a hacer dentro de muy poco. Los trabajos para su instalación ya se han iniciado una vez que se cerró la tapa del futuro césped retráctil. Es un proceso más complejo que el de años anteriores, ya que no se podrá desplegar de una vez sino que irá por partes mientras se llevan a cabo otros trabajos de las obras. El césped será provisional esta temporada y el próximo verano se acabará de dejar todo listo para el nuevo.

Iluminación y sonido

También es prioritario tener preparado todo el tema de luces y sonido de cara al primer partido en casa. La instalación y ensayos, en estos casos, llevan días llevándose a cabo. Importante es la iluminación del terreno de juego, que deberá contar con el visto bueno de LaLiga. Se usarán, además, pantallas provisionales hasta que se instale el vanguardista videomarcador que contará el Santiago Bernabéu cuando acaben las obras.

Asientos provisionales

Los operarios también trabajan en colocar asientos en aquellas partes del estadio en los que tuvieron que ser levantados, como la grada alta del lateral oeste, la grada del box central y la grada baja este a ambos lados de la nueva grada abatible, que también contará con asientos. Serán también provisionales, ya que todavía se desconoce el diseño y color que tendrán los asientos definitivos para el nuevo Bernabéu.

Además, se han demolido palcos de familiares de jugadores, palcos en nivel 1 del lateral oeste y tramos de escaleras en los fondos norte y sur para habilitar espacios.

Cubierta y exterior

Antes del regreso del público, también se deben acometer otros trabajos en la cubierta y en el exterior. Por ejemplo, el objetivo es que cuando acabe el mes de agosto ya se han demolido las antiguas torre B -casi derruida ya- y torre C. Lo que ya forma parte del pasado es la antigua cercha de Padre Damián, que ya fue descendida este lunes.

En el exterior también se trabaja en el izado de la cerca número 4 tras haber concluido el proceso de la cercha 3. Una vez empiece a ser ascendida, se procederá a la demolición parcial de la plataforma auxiliar del lateral del paseo de la Castellana sobre la que se han ido construyendo las cuatro megacerchas longitudinales. Sobre lo que quede de la plataforma y la que se está construyendo pegada a la fachada, se construirá la viga museo en la que se apoyará la ampliación de los forjados de los niveles del lateral oeste.

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