Segunda equipación del Leganés

Segunda equipación del Leganés

Fútbol LA LIGA

El Leganés cambiará de equipación para combatir la violencia de género

29 agosto, 2018 17:20

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La violencia de género sigue siendo una de las lacras de la sociedad moderna. Son muchas las iniciativas que han surgido en la población para ponerle fin de una vez por todas. El fútbol no es la excepción, y el fin de semana se hará visible la lucha en un escenario de gran envergadura en las camisetas de los jugadores de un equipo de Primera División.

Se trata del Leganés, que ha anunciado con antelación que durante el partido en el Santiago Bernabéu contra el Real Madrid lucirá su camiseta de visitante. El motivo de la decisión es visibilizar este problema al mayor público posible gracias a la publicidad y difusión que otorga el deporte, y más en un gran escenario como el coliseo blanco.

La segunda equipación del Leganés es de color morado y negro, colores elegidos para dar visibilidad a la causa. Además, en la parte posterior de la camiseta hay un lazo morado y el mensaje #NoALaViolenciaDeGénero.

Lunin entrena por primera vez con el Leganés

Lunin entrena por primera vez con el Leganés EFE

Concienciado con causas sociales

Esta no es la primera ocasión en la que el Leganés da su apoyo a la lucha contra la violencia de género. La campaña tiene el nombre de "Corta a tiempo. El maltrato no llega de repente". La misma comenzó el año pasado, en la que participó el equipo madrileño en colaboración con la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género. También participaron el Ayuntamiento de la ciudad y LaLiga.

El Leganés jugará en la tercera jornada el sábado a las 20:45 horas. Será el primer partido de la temporada en el que jueguen con el uniforme de visitante y, en consecuencia, que se vea el mensaje contra la violencia de género. Los pepineros ya hicieron lo mismo la anterior temporada para difundir el mensaje en un partido de máxima repercusión. Entonces el adversario era el Barcelona en Butarque. En ese partido los dos equipos jugaron con la segunda indumentaria, algo con lo que los catalanes no tuvieron ningún problema.